5 tips de Psicología para Bajar de Peso
Muchas personas que intentan bajar de peso se encuentran con dificultades durante este proceso debido a que ponerse a régimen no solamente consiste en dejar de comer esto y lo otro para eliminar grasas y toxinas acumuladas en el cuerpo, sino que ponerse a dieta consiste en eliminar y depurar también una serie de patrones y hábitos mentales, y algunas actitudes que muchas veces están fuertemente arraigados en la conducta de la persona.
A mi parecer, las dietas fracasan porque no se tiene un adecuado acompañamiento emocional. Muchas de las personas que inician dieta no solamente necesitan tener una lista de lo que deben o no comer, sino una guía emocional que les apoye durante este proceso, sobre todo a descubrir y a ser conscientes de todo aquello que les limita su bienestar y, en algunos casos, su salud, así como profundizar en patrones culturales y sociales que exigen ciertos estereotipos para que la persona sea aceptada. La sociedad espera ciertas conductas, respuestas y “cuerpos” de las personas; muchas veces no solo las espera, sino que las exige. Esto pueden influir notablemente y de formas no muy positivas en la voluntad de la persona, pues en el fondo puede haber una respuesta de rebelión:
¿Por qué tengo que ser delgada? ¿Por qué no pueden quererme o aceptarme así?
Si estas preguntas vagan dentro de la persona sin encontrar respuestas, pueden transformarse en pretextos, debilidades y sabotajes (muchas veces inconscientes) en su dieta. Así como las preguntas anteriores, pueden surgir muchas más, muchas veces a nivel inconsciente, aunque no las notemos. Por eso, muchas veces durante la dieta, se flaquea ante la voluntad de seguirlas.
No saber las razones por las que actuamos debilita la voluntad, pues la razón es la fuerza que le da potencia a la acción. Si no tienes razones claras, entonces podrías estar actuando a nivel mecánico, condicionado o repetitivo, no por una fuerte convicción. Y la convicción es lo que le da gasolina a la voluntad.
Así que aquí te damos 5 preguntas claves que te ayudarán a reforzar tu voluntad y a vencer o diluir aquellas limitaciones en tu ánimo que podrían hacerte flaquear o dejar tu dieta, o no obtener los resultados que esperas. Así que si planeas hacer dieta, no dudes en considerarlas, te darán información valiosa sobre ti y seguridad en lo que quieres hacer.
Pregunta 1: ¿Para qué quiero bajar de peso?
Tu respuesta debe de ser lo más consiente y clara posible, y debes analizarla para que te dé datos claros. Por ejemplo, si dices “Quiero bajar de peso para verme bien”, entonces quizá quieres bajar de peso porque en el fondo necesitas la aceptación o aprobación de los demás. Pero qué tal si dijeras: “Para sentirme bien, por salud, porque quiero darle lo mejor a mi cuerpo”. Bueno, esto ya cambia las cosas. Si empiezas algo para tu beneficio, entonces tendrás más fuerza y voluntad que si lo empiezas “por alguien más”.
Pregunta 2: ¿Tengo que bajar de peso? ¿Por qué?
Bueno, probablemente aquí haya muchas respuestas distintas, y es necesario que lo hagas con honestidad. No digas “sí” porque “es la respuesta correcta”, deja que fluyan tus verdaderos sentimientos, sin que los juzgues. Una vez que hayas contestado la pregunta entonces puedes considerar que bajar de peso no es una obligación ni es algo que tengas qué, a pesar de lo que digan tu novio, tu mamá o los estereotipos allá afuera. Sin embargo, sí es necesario que notes cómo te percibes, si te gusta tu cuerpo así como es, si en verdad lo aprecias, apruebas y valoras tal cual es. En realidad, no importa si al otro le gustas o no, importa si tú te gustas a ti misma, a ti mismo. Este enfoque puede cambiar tu respuesta.
Pregunta 3: ¿Si bajo de peso, me van a querer más?
Como en las anteriores respuestas, sé honesta y di lo que sientes y percibes. Luego, analiza sin juicio. Si contestaste “sí”, entonces lo más probable es que tú no te apruebes ni aceptes así como eres, y seas quien principalmente rechaza su aspecto y su persona. Si contestaste “no”, entonces puede ser un buen augurio, porque entonces no estás bajando de peso para recibir algo a cambio, sino por sentirte bien. Si contestas “no sé”, es que no tienes claras las razones y es necesario que clarifiques este punto para que no sea un impedimento. En realidad, el aspecto físico puede darte una bonita o atractiva carta de presentación, pero ninguna persona te amará o querrá nada más por tu “portada”, sino por tu contenido. Esto equivale a decir que un buen libro es bueno sólo por su portada. Sin embargo, considera que si “tu contenido” es de rechazo, baja autoestima, desorden, confusión y demás, entonces es lo que percibirán de ti las demás personas. Por eso es muy importante empezar a quererte, clarificarte y crear seguridad en ti mismo, en ti misma, pues más allá de cómo te veas, está lo que eres.
Pregunta 4: ¿Puedo quedarme con este cuerpo y peso, y ser una persona amada?
Esta es una pregunta que puede ser compleja, pues quizá no sepas exactamente qué responder. Sin embargo, debes intentar responderla, y una vez que lo hayas hecho, entonces puedes considerar lo siguiente. Si tú te amas como eres, cualquier persona te querrá como eres. El problema y la duda está en que la vacilación esta en ti. ¿Te admiras y aceptas lo suficiente como para que una persona lo haga así? ¿Qué tipo de relaciones atraes a tu vida? ¿Te han hecho sentir ellas lo especial, importante y valiosa que eres? Si la respuesta es no, entonces debes considerar lo que estas atrayendo a tu vida, pues lo que atraes es un reflejo de tus más hondos sentimientos respecto a ti. Y si dices: ¿Por qué unas personas me tratan bien y otras no? Es porque hay personas que están ahí para hacernos notar nuestras más hondas debilidades, y por lo general estas personas son la pareja y la familia. Los amigos muchas veces solo son los acompañantes en este viaje.
Así que si deseas bajar de peso y tener herramientas para acabar cualquier dieta que te propongas, puedes seguir estos tips y verás cómo el proceso se aligera y hace más interesante, nutritivo y valioso.