Agricultura ecológica…….. o reinventar el futuro
Millones de microorganismos viven en ella. De estas materias en descomposición que se encentran en la superficie del suelo depende su fertilidad, y proporcionan la alimentación necesaria para que las plantas crezcan sanas. Los abonos químicos merman estos microorganismos, y los campos tratados con ellos se vuelven cada vez más enfermos a medida que van perdiendo su fuente de vida: el humus. Las plantas crecen más de prisa, en contra de su naturaleza. Su exterior es bonito a la vista y parece sano, pero en su interior no pueden formarse correctamente ni desarrollar las defensas necesarias para evitar las enfermedades y las plagas, por los que si no quieren perder la cosecha deben usar plaguicidas. Y, todos sabemos que la tierra “ESTA CADA VEZ MÁS MUERTA” , las aguas subterráneas y el aire se contaminan, los peces y las aves mueren, los árboles desaparecen. Llega …. el desierto.
LA AGRICULTURA ECOLÓGICA
Es una forma alternativa de enfocar la producción agraria basada en el respeto por el entorno que nos rodea, produciendo alimentos sanos y de máxima calidad, actualizando los conocimientos técnicos y científicos. Para lograr estos objetivos se aplican una serie de técnicas que deben:
– Estar integradas en el agro sistema de forma que no originen impactos ambientales.
– Potenciar la fertilidad del suelo y la capacidad productiva garantizando la continuidad de la producción agraria.
– Respetar los ciclos naturales de los cultivos y aportar a los animales unas condiciones de vida saludables.
– No incorporar a los alimentos sustancias que resulten perjudiciales para la salud o mermen su capacidad alimenticia.
El consumidor actualmente puede adquirir los productos de agricultura ecológica en diferentes puntos de venta; grandes superficies, asociaciones de consumidores, tiendas especializadas, etc. Buscando siempre la etiqueta identificativa del organismo de control correspondiente y la referencia de cultivo ecológico.
La falta de una legislación eficaz que identifique los alimentos transgénicos hace del aval de Agricultura Ecológica la garantía más fiable de que un alimento no contiene componentes manipulados genéticamente.
La agricultura actual ha llegado a separarse tanto del medio que se ha convertido en uno de sus peores enemigos. La generalización del uso de abonos de síntesis química provoca la degradación del suelo, el agua y el aire.
La Agricultura Ecológica evita estos problemas al utilizar sólo productos y métodos naturales. Se aprovecha el potencial productivo del suelo, manteniéndolo como un sistema vivo y mejorando su fertilidad natural. Se crean sistemas equilibrados, con plantas fuertes y sanas, de forma que los propios procesos naturales y la resistencia de los cultivos sean suficientes para evitar plagas y enfermedades. El ganado se cría en un ambiente propio y natural, alimentándose de forma equilibrada. Así se evita el tener que recurrir al empleo de sustancias o técnicas que puedan causar cualquier perjuicio al medio.
La Agricultura Ecológica necesita sistemas diversos, en los que la variedad de cultivos, los setos, la hierba bajo los frutales, los abonos verdes, la vegetación de márgenes y ribazos, … genera ecosistemas ricos y de gran valor ambiental.
En definitiva, se mantiene un agro ecosistema complejo y vital, relacionado íntimamente con la naturaleza.
Fuente: DAIQUI