Alimentación adecuada durante el embarazo

Publicado: 17/04/2008 - Actualizado: 11/08/2018

Durante el embarazo, la mujer necesita no sólo incrementar las proteínas que toma, sino cuidar un adecuado consumo de ácido fólico y otras vitaminas de suma importancia, además de cuidar una equilibrada ingesta en su dieta de importantes minerales como el hierro, el calcio y el manganeso.

La dieta apropiada

Desde que una mujer sabe que está embarazada, es el momento en que debe asegurarse de que su alimentación sea más nutritiva y correcta. Es importante en este periodo hacer un esfuerzo por evitar los productos chatarra y los productos refinados o con alto contenido en azúcares refinadas, ya que estos alimentos producen una sensación de saciedad, es decir, dan la sensación de estar satisfecho pero son carentes de las vitaminas y los minerales que necesita el bebé y el cuerpo de la mamá.

Muchas veces se piensa que el comer más significa comer mejor darle al cuerpo la suficiente materia prima para que funcione bien. Muchas mujeres sienten la necesidad de comer “antojitos”, y en ocasiones el consentirse en este periodo puede llevar al abuso de alimentos no nutritivos. Sin embargo, en realidad lo que tu cuerpo requiere es solamente el consumo de 300 calorías más de las que consumías antes para cubrir el gasto energético que tiene ahora.

Decir 300 calorías en realidad no es mucha cantidad de alimentos: por ejemplo, tomarte un jugo de naranja o manzana fresca con un caldo de arroz o lentejas y si acaso un pan o tortilla, ya cubren dicha cantidad. Tu dieta en este momento no debe exceder las 2m500 calorías, y estas calorías deben procurar adquirirse de alimentos frescos y lo más naturales posibles, como los jugos o bebidas de frutas naturales, los panes integrales, la leche de soja, etcétera. Tu dieta debe estar lo más enfocada a cubrir necesidades nutrimentales que a satisfacer el mero apetito. Si sufres de mucha hambre, prefiere las frutas frescas o las ensaladas con germinados en luigar de recurrir a un producto chatarra.

Minerales y vitaminas esenciales

Es importante que no descuides en esta etapa los minerales y vitaminas en tu cuerpo. A continuación te damos una lista de algunos de ellos y de la función benéfica que aportan a tu cuerpo y al desarrollo del nuevo bebé.

Calcio: este mineral es sabido que ayuda a desarrollar y mantener los huesos y los dientes fuertes. Cuando se esta embarazada, el calcio que se requiere aumenta pues el bebé que se está formando demanda de este mineral. Alimentos que lo contienen:  lácteos, limón, naranja, almendras. etc.

Hierro: este mineral es necesario para la producción efectiva de glóbulos rojos, indispensable para prevenir la anemia y mantener vigorosos y fuertes todos los sistemas. Alimentos que lo contienen: Todas las carnes magras, en especial el hígado, las espinacas, los cereales, las algas marinas, loe vegetales frescos.

Vitamina A: esta vitamina es indispensable para la regeneración celular, para la piel, para el desarrollo de una buena visión y para la formación del sistema óseo. Alimentos que la contienen: todos los vegetales de hoja verdeoscura, las papas dulces, las zanahorias.

Vitamina C: indispensable para el buen funcionamiento del sistema inmunológico, para la formación y conservación de encías, diente sy huesos sanos y fuertes. Esta vitamina ayuda a absorber el hierro en la sangre y ayuda a combatir infecciones de todo tipo. Alimentos quela contienen: todas las frutas cítricas frescas como el limón, la naranja, la ciruela, la piña, la guayaba, etc., los tomates, el polen de abeja.

Vitamina B6: vitamina útil para el desarrollo saludable de glóbulos rojos, ayuda a utilizar efectivamente las grasas, las proteínas y los carbohidratos. Alimentos que la contienen: la carne de cerdo, los cereales integrales, los plátanos, la leche de soja enriquecida.

Grasas en el embarazo

Las grasas son indispensables en este periodo. Es un elemento que ayuda al almacenamiento de energía y es vital para muchas funciones del organismo, además de ser un elemento de protección de órganos tan importantes cómo el cerebro y el corazón. Sin embargo, es importante saber que tipo de grasas o aceites son los adecuados. Hay que preferir, sobre todo, las grasas insaturadas, aquellas que se obtienen de las semillas como el girasol y el maíz. El aceite de oliva, de soja y el linoleico son los más saludable de todos y los más recomendado por sus altos beneficios para el cuerpo. Cuando compres aceite, asegúrate de que sea presado en frío y evita los aceites hidrogenados.

En este periodo es importante que limites el consumo de otras grasas cómo la carne, la leche, los lácteos, etc., a un 30% o menos de lo que solías comer. Esto ayudara a que el peso que ganes sea sólo el necesario y tu cuerpo (en especial tu columna) no tenga que soportar un peso excesivo y puedas evitar, a la larga, las molestas hemorroides. 

El ácido fólico es otro elemento que no puede faltar en este periodo en tu dieta. Muchos cereales ya vienen enriquecidos con esta vitamina y los expertos la recomiendan especialmente durante los primeros meses de embarazo.

Acerca del autor
  • Miriam Reyes

    Miriam Reyes una profesional experta en nutrición y dietética. Tiene más de 12 años de experiencia en  atención a pacientes con sobrepeso y problemas de alimentación. Estudió en la Universidad del Valle de Atemajac  (UNIVA), donde obtuvo la licenciatura en nutrición. Perfil en Linkedin.