Como evitar comer alimentos procesados
¿Cuándo fue la última vez que probamos un durazno? Realmente pusimos atención a su textura aterciopelada, a su pulpa jugosa, y ¿disfrutamos de su sabor y de la experiencia de comer el fruto? Día a día incorporamos a nuestra dieta, más y más alimentos falsos, que han sido procesados múltiples veces, y que poco tienen que ver con alimento original. Es hora de volver a una alimentación más saludable y natural, afortunadamente hay algunos pasos que podemos seguir.
Busque la verdadera satisfacción
Cuando disfrutes de una fruta, examina su color, olor, y la experiencia de tomar un bocado. Toma un momento para disfrutar de los sabores genuinos. Para la comparación, come un caramelo con sabor a frutas. Ten en cuenta que estos tienen, sobre todo un sabor dulce sin mucha complejidad, eso es porque la grasa, el azúcar y la sal se añade a los alimentos procesados sirve para enmascarar el sabor metálico de conservantes artificiales, edulcorantes y otros aditivos químicos. Los alimentos procesados también están hechos para disolverse rápidamente en la boca, para ir comiendo más rápido y en mayor cantidad, a menudo dejándonos llenos, pero no satisfechos. Ahora sabes por qué esa bolsa de papas fritas, desaparece antes de que realmente hayas tenido la oportunidad de “probarlas”.
Lee las etiquetas con prudencia
Si sabemos, leer las etiquetas podemos identificar que productos son procesados y cuales, no. Ingredientes, como, aceite de oliva, sal, ajo y queso parmesano, cumplen con los criterios de alimentos naturales para una comida de verdad, sin embargo los que tienen conservantes, como BHT, espesantes como goma guar, o sabores artificiales, no. Lo mismo aplica para cuando se trata de panes, cereales, y pastas.
Disfrute lo que hay en su plato
Disfruta de ese pedazo de chocolate oscuro mientras estás sentado en una banca del parque, en lugar de hacerlo mientras te sientas en tu escritorio, poniéndote al día con las redes sociales. Siéntate en tu comedor para la comida y no delante de la TV. Comer sin distracciones te ayudará a disfrutar de los sabores, texturas, olores y colores de la comida en tu plato.
Elimina el exceso de sal, grasa y azúcar
Trata de cocinar con pequeñas cantidades de estos ingredientes, puedes usar sustitutos naturales. Especias fuertes como el ajo, la pimienta, el orégano pueden llegar a reducir la necesidad de sal. Para reducir la grasa, prefiere preparaciones asadas, o al horno, evita los alimentos fritos y prefiere los aceites vegetales tales como el aceite virgen de oliva. En cuanto al azúcar, reduce gradualmente la cantidad de azúcar.
Deja que tu paladar se acostumbre
Si bien puede ser difícil al principio para soltar la barra de chocolate o papas de la tarde, poco a poco perderás el gusto por los alimentos excesivamente dulces y salados, y tu paladar se adaptará a una variedad de nuevos sabores.
Elige alimentos de alta calidad
No es necesario optar por sólo lo orgánico o producir nosotros el alimento, aunque ambos son sin duda preferibles, debes buscar productos que contengan la menor cantidad de ingredientes procesados para asegurar un mejor sabor y mejor calidad en nuestras preparaciones. No se puede, por ejemplo, compara la experiencia de comer y disfrutar del grano entero, si por ejemplo eliges arroz blanco en vez de color marrón (integral). Busca panes y pastas con harina de trigo o harina de trigo integral como el primer ingrediente para realzar su sabor y contenido nutricional. Y, por supuesto, elige productos frescos, siempre que sea posible, en lugar del enlatado. Frutas y verduras congeladas son preferibles solo cuando las frescas no están disponibles.
No saltes los tiempos de comidas
Parte del disfrute de los alimentos se debe a que tengamos el hambre suficiente como para desear nuestra comida, pero demasiada hambre te puede hacer llegar desesperado, y al comer con ansiedad, comemos más y no disfrutamos nuestros alimentos. Mantener la ansiedad y el hambre en exceso al margen se puede lograr al consumir tres comidas al día, de forma bastante regular y tener una merienda a media tarde y probablemente a media mañana.