Dientes sensibles: causas, remedios y prevención

Publicado: 31/05/2010 - Actualizado: 16/05/2016

Si cuando tomas te caliente o comes algún helado sientes dolor o una fuerte molestia en tus dientes, es que puedes tener un problema conocido como dientes sensibles. Aunque no lo parezca, es un problema muy común, el cual puede convertirse en un impedimento nada agradable para disfrutar la comida, pues los cambios frecuentes de temperatura en los alimentos harán imposible que se disfrute el tan agradable momento de comer. 

Sin embargo, no creas que todo esta perdido. Puedes hacer algunas cosas para ayudar a remediar y prevenir esta afección. Pero antes, es necesario que sepas las causas que provocan esto para que puedas evitarlas.

¿Qué ocasiona que los dientes se vuelvan sensibles?

Una de las causas es que la parte del diente que se puede ver está recubierta por una capa de esmalte que protege  a la dentina. Es cuando el esmalte se pierde o corroe, o se adelgaza, que la dentina queda expuesta, y el diente se vuelve sensible. La dentina se puede perder o desgastar por algunas causas:

Causas que provocan los dientes sensibles:

• Un cepillo de dientes de abrasión o de cerdas muy duras.
• Un cepillado agresivo o demasiado duro.
• El cepillado vigoroso barriendo de un lado a otro el diente.
• Rechinar los dientes: este es un hábito donde los dientes se tallan con frecuencia, lo que puede ocasionar que el esmalte se desgaste, haciendo los dientes sensibles.
• Mala higiene bucal que provoca erosión del diente.
• Erosión dental ocasionada por la pérdida de esmalte debido a sustancias agresivas como el azúcar, los refrescos, bebidas ácidas, alimentos ácidos, goma de mascar, etc.
• Recesión de las encías: cuando las encías retroceden pueden dejar las raíces del diente  expuestas, y estos pueden ser más sensibles.
• Enfermedad de las encías: la acumulación de placa o sarro en los dientes puede provocar problemas en las encías que afectaran la sensibilidad del diente. Esto puede ocurrir sobre todo cuando se masca chicle y se empuja el sarro a las encías, lo cual incluso pudiese destruir el soporte óseo de los dientes, formando bolsas en las encías alrededor de los dientes, provocando que la zona sea difícil de limpiar y ocasione enfermedad de las encías.

Otras causas de sensibilidad en los dientes:

• Un diente picado, agrietado, roto o relleno: cuando hay fisuras en los dientes, la comida puede filtrarse hasta la raíz del diente ocasionando dolor, sobre todo cuando las temperaturas son extremas.
• Uso de blanqueador dental: los blanqueadores de dientes corroen el esmalte de los dientes. Muchos pacientes que se blanquean los dientes presentan sensibilidad en corto tiempo después de que sus dientes se blanquearon.

Cura y prevención de dientes sensibles

• Cepillado e higiene: Lo primero es mantener una higiene bucal efectiva. Es necesario aprender la forma de un buen cepillado, que no se ejerza mucha presión en los dientes sin dejar de atender que estos queden muy limpios, exentos de sarro y comida.Se aconseja usar cepillos de dientes eléctricos, los cuales ayudan a remover la placa con una presión adecuada.

• Encías sanas: es algo indispensable para evitar la sensibilidad de los dientes. Para evitar su retroceso y mantenerlas en buen estado, es recomendable darles un suave cepillado cada vez que uno se lava los dientes. Un remedio muy favorable es untar un poco de agua con gotas de limón en las encías. Aunque no lo creas, el limón es un excelente tónico para mantener sanos los dientes y las encías. En lugar de enjuague bucal, agrega unas gotas de limón a una taza de agua y enjuaga tu boca. Si el limón fuese malo para los dientes, entonces no podrías tomar ni aguas del limón ni alimentos con este ingrediente. Indiscutiblemente, dañan muchísimo más los dientes y encías la toma de refrescos y jugos o aguas azucaradas que el limón. El limón, incluso, ayuda a prevenir caries.

• Encias en su lugar: Para ayudar a que las encías no retrocedan, hay que reducir la presión que usamos para cepillarnos los dientes. Para esto, debes ser muy consciente a la hora de cepillarte los dientes, hacerlo con cuidado y con una presión suave pero firme. También ayuda dar masajes con el dedo índice en las encías. Cada vez que puedas, da un masaje circular en las encías, empujándolas suavemente hacia abajo.

• Evita tomar refrescos, dulces y bebidas azucaradas. El cereal refinado de caja que venden en las tiendas de autoservicio son dinamita para los dientes, ya que el cereal suele quedarse empastado entre los dientes, incluso con un cepillado muy minucioso, cuesta quitar el cereal pegado. Lo mejor es no comerlos, sobre todo no dejar que los niños lo consuman a diario, ya que este tipo de producto es en verdad corrosivo con el esmalte de los dientes. 

• Evita rechinar los dientes o apretarlos cuando te sientas tenso, ansioso o nervioso.

Remedios caseros para los dientes sensibles:

1. Enjuague de fluoruro o gel fluorado: puede ayudar a disminuir la sensibilidad sobre todo para las aquellos con dientes cariados.
2. Mantén tus dientes impecables: la suciedad en los dientes y la sustancia gomosa que se forma y acumula en los contornos de los dientes produce un ácido que irrita severamente el esmalte. Al menos, cepilla tus dientes 2 veces al día, sobre todo después de que comas.

3. ¡No bebas refrescos ni chupes caramelos! Si bebes refresco o comes dulces, galletas, etc., al menos enjuaga tu boca después de comerlos con un poco de agua pura. Evita mascar chicles y chiclosos, que son terribles para los dientes. Usa el hilo dental al menos una vez al día, pasa suave por entre diente y diente, no lo hagas con prisas para evitar lastimar las encías.
4.  ¡Deja de fumar! Además de todas las secuelas   desfavorables que trae el tabaco, tus dientes sufren mucho con los ácidos y sustancias tóxicas que tiene.

Acerca del autor
  • K. Laura Garcés G

    Escritora, terapeuta y conferenciante. Es una amante de la medicina natural y del poder de la mente y las emociones en el cuerpo y la vida.  Además, ha estudiado nutrición y desarrollado dietas apropiadas para apoyar este proceso de curación.Ha escrito más de 1500 artículos en revistas de España y México, ganadora de dos concursos literarios. Linkedin