Ecopilas
La Fundación para la Gestión Medioambiental de Pilas, ECOPILAS , nace con el objeto de responder al principio de corresponsabilidad de los productores y primeros comercializadores de pilas y baterías en el mercado español sobre la gestión de los residuos derivados de estos productos una vez llegados al final de su vida útil, en colaboración con los demás agentes implicados.
La Fundación nace al amparo de las iniciativas desarrolladas a lo largo de los últimos cuatro años a través de la Comisión de Pilas de ASIMELEC (Asociación Multisectorial de Empresas Españolas de Electrónica y Comunicaciones). Estos años han supuesto un importante reto y esfuerzo, materializando una experiencia de debate y consenso entre empresas rivales en el mercado, aunando posiciones y compromisos más allá de los intereses particulares y anticipándose de forma voluntaria a planificar las acciones que pueden ser exigidas legalmente, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 7 de la Ley 10/98, de Residuos.
La Fundación fue constituida formalmente el pasado 17 de Octubre de 2000. Es una entidad sin ánimo de lucro , con personalidad jurídica propia, sometida a la tutela del Ministerio de Medio Ambiente a través del ejercicio del Protectorado.
La defensa del medio ambiente constituye su fin de interés general y para ello tiene por objeto el diseño, la organización y gestión de un Sistema Integrado de Gestión de pilas y baterías domésticas usadas (SIG) procedentes del consumo doméstico.
De esta forma los fundadores de ECOPILAS, responsables de la puesta en el mercado de un 75% del total de pilas puestas en circulación en España , se constituyen en parte activa en la optimización ambiental y económica de la gestión de las pilas y baterías domésticas usadas, asumiendo la iniciativa técnica, financiera y de gestión para dar solución a estos residuos.
No obstante para conseguir el éxito del SIG es necesario contar con la corresponsabilidad del resto de agentes económicos y sociales implicados en el ciclo de vida de las pilas: la distribución y los consumidores , representados en el Patronato de la Fundación y las Administraciones Públicas competentes en materia de gestión de residuos.
La Fundación se plantea el año 2001 con el reto y el objetivo de la puesta en marcha del Sistema Integrado de Gestión y la definición de las bases de su desarrollo futuro. Este primer año de actividad va a suponer, sin duda, un importante esfuerzo de colaboración, participación, compromiso y asunción de responsabilidades entre todos los agentes participantes
Vida de una pila
La vida de la pila comienza en las industrias de las empresas fabricantes. Para que las pilas lleguen a los consumidores es necesaria la colaboración de los distribuidores (que las transportan hasta los puntos de venta) y de los comercios (que las venden directamente a los usuarios).
Cuando las pilas y baterías llegan a manos de los consumidores, éstos las usan en los diversos aparatos eléctricos: radios, juguetes, teléfonos móviles, mandos a distancia, relojes, aparatos para sordos, básculas, cámaras, linternas y un largo etc.
Cuando estas pilas se gastan o estas baterías terminan de ser útiles, es cuando empieza el problema de la contaminación, ya que si se mezclan con el resto de basura o se tiran el cualquier sitio son contaminantes.
El papel de la Fundación en este momento es el de facilitar al consumidor el reciclado de las pilas ofreciendoles a éstas una salida una vez que dejan de ser útiles.
El usuario deposita sus pilas en unos contenedores apropiados con la confianza de que serán transportadas a las plantas de tratamiento para su posterior reciclaje.
Desde los puntos de recogida de las pilas y baterías usadas, la Fundación se encarga de su transporte a las plantas de clasificación y tratamiento, donde se consigue por una parte evitar que los productos químicos de las pilas puedan contaminar y por otra parte, no menos importante, se consigue una reinserción en la industria en general de elementos escasos en la naturaleza.
¿Por qué adherirse?
La Fundación se plantea como uno de sus objetivos fundamentales lograr la adhesión al SIG de cualquier productor, importador, adquiriente comunitario, agente o intermediario, o cualquier otra persona responsable de la puesta en el mercado de pilas y baterías domésticas, que con su uso se conviertan en residuos.
Para su adhesión al Sistema Integrado de Gestión de pilas y baterías domésticas usadas las empresas deberán estar comercializando pilas y/o baterías, o bien comercializar aparatos que contengan pilas y/o baterías, cumplimentar el contrato de adhesión y comprometerse a satisfacer la aportación económica que les corresponda en función del tipo y unidades de pilas que pongan en el mercado.
La definición y aprobación de las aportaciones económicas con las que deben contribuir las empresas adheridas, los términos para su aplicación, y el desarrollo del sistema de cálculo de la cantidad a aportar por cada empresa atendiendo al peso y categoría de productos puestos en el mercado, constituyen una de las primeras acciones que deberá abordar la Fundación.
Se cuenta como punto de partida con los análisis económicos desarrollados por la Comisión de Pilas de ASIMELEC en los estudios previos a la Constitución de la Fundación. Estos cálculos están basados en los costes de las distintas operaciones que podría ser objeto de financiación por el SIG y en la definición de las categorías-tipo de pilas y baterías sobre las que podría aplicarse el modelo de cálculo.
La identificación y captación de empresas al SIG representará durante el ejercicio de 2001 otra de las importantes actividades a acometer por la Fundación. Se desplegarán acciones de mailing y contacto con las empresas que se hayan identificado como base probable de adhesión al sistema. Se intensificarán las acciones encaminadas a la identificación de importaciones y adquisiciones intracomunitarias.
Como complemento a la acción divulgativa y de captación activa de empresas potenciales se desarrollará un dossier informativo, que permita la difusión sobre la sistemática a seguir para la adhesión al sistema e incorpore el contrato tipo, las aportaciones económicas en función del tipo de pila y el sistema de cálculo de la misma.
La existencia de un número concreto de empresas adheridas al sistema, que representen un elevado porcentaje del mercado nacional de ventas de pilas, permitirá afrontar las negociaciones con las Comunidades Autónomas a las que se hace referencia en al apartado precedente con una base muy consolidada.
Todos estamos obligados a participar, en la medida de nuestras posibilidades, en el reciclado de las pilas y baterías que consumimos, pero además estamos obligados a cumplir lo que dice la Ley de Residuos:
l La Ley de Residuos, en su art. 7.1, establece que "Sin perjuicio de las normas adicionales de protección que, en su caso, dicten las Comunidades Autonómicas, el productor, importador o adquirente intracomunitario, agente o intermediario, o cualquier otra persona responsable de la puesta en el mercado de productos que con su uso se conviertan en residuos, podrá ser obligado de acuerdo con las disposiciones que reglamentariamente apruebe el Gobierno a: b) Hacerse cargo directamente de la gestión de los residuos derivados de los productos, o participar en un sistema organizado de gestión de dichos residuos , o contribuir económicamente a los sistemas públicos de gestión de residuos, en medida tal que se cubran los costos atribuibles a la gestión de los mismos"
l De acuerdo con el art. 8 de la Ley de Residuos , "para el cumplimiento de todas o alguna de las obligaciones previstas en el artículo 1 del artículo anterior, los responsables de la puesta en el mercado de productos que con su uso se conviertan en residuos podrán organizar sistemas propios de gestión mediante la celebración de acuerdos voluntarios aprobados o autorizados por las adminiatraciones competentes, o mediante convenios de colaboración con éstas".
Definiciones
Definición científica de pila:
Las pilas y baterías eléctricas se usan como fuente de energía obtenida de la acción química de las pilas eléctricas.
En general se componen de celdas electrolíticas en las que dos placas eléctricas de metales distintos (cátodo y ánodo) están separados entre sí por una solución iónica que es el medio capaz de conducir electrones entre ambas placas.
Estos elementos están contenidos en un envase o recipiente metálico o plástico, con separadores de los elementos activos como papel o cartón, auxiliares constructivos como plomo o cadmio que mejoran la embutición o mercurio que limita la corrosión, además de elementos de presentación comercial.
Existen muchos tipos de pilas que se pueden clasificar inicialmente en dos grandes grupos: o Primarias o pilas que se agotan por haberse convertido la energía química en eléctrica, no es posible recuperar el estado de carga. o Secundarias o baterías, en las que la transformación de la energía química en eléctrica es reversible, por lo que se pueden recargar. Por tanto la cantidad de residuos generados es mucho menor.
Determinados tipos de baterías, sobre todo para usos industriales o de automoción pueden ser, a su vez, una agrupación de baterías a modo de células puestas en serie.
Definición legal de pila:
La Ley de Residuos, en su artículo 3, define los "Residuos" como; "cualquier sustancia o residuo perteneciente a alguna de las categorías que figuran en el anejo de esta ley, del cual su poseedor se desprende o del que tenga la intención u obligación de desprenderse.
En todo caso, tendrán esta consideración los que figuren en el Catálogo Europeo de Resides (CER), aprobado por las Instituciones Comunitarias ". En dicho Catálogo se incluyen, en la categoría (160600), Pilas y Acumuladores: (01) Baterías de plomo; (02) Baterías de Ni-Cd; (03) Pilas secas de mercurio; (04) Pilas alcalinas; (05) Otras pilas y acumuladores; (06) Electrolito de pilas y acumuladores, y en la categoría (200000) Resides Municipales y Asimilables procedentes del comercio, industria e instituciones: (20) Pilas y acumuladores.
La Ley de Residuos, en su artículo 3, distingue entre dos categorías de "residuos":
(i) Residuos urbanos o municipales: "los generados en los domicilios particulares, comercios, oficinas y servicios, así como todos aquellos que no tengan la calificación de peligrosos y que por su naturaleza o composición pueden asimilarse a los producidos en los anteriores lugares o actividades ".
(ii) Residuos peligrosos: "aquellos que figuren en la lista de residuos peligrosos, aprobada en el Real Decreto 952/1997, así como los recipientes y envases que los hayan contenido. Los que hayan sido calificados como peligrosos por la normativa comunitaria y los que puede aprobar el Gobierno de conformidad con lo establecido en la normativa europea o en convenios internacionales de los que España sea parte".
En la lista de residuos peligrosos del Decreto 952/1997 (que publica la lista aprobada por la Decisión 94/904/CE, del Consejo, de 22 de diciembre) se incluyen dentro de la categoría (160600) Pilas y acumuladores; (01) baterías de plomo, (02) baterías de Ni-Cd; (03) Pilas secas de mercurio y (06) Electrolito de pilas y acumuladores.
La viabilidad de este programa de recogida y reciclado de pilas pasa por la participación de todos y cada uno de los agentes participantes:
– Los consumidores colaboran con el sistema depositando sus pilas usadas en los contenedores previstos para este fin, evitando de este modo que terminen el la basura doméstica.
Su colaboración es obligatoria para el éxito del programa.
– Los Distribuidores prestan el espacio necesario en sus establecimientos para los contenedores de pilas y avisan al sistema de recogida cuando los contenedores están llenos.
Su contribución es libre de cargas para el sistema.
– La Administración Local o Autónoma presta su sistema de recogida de residuos para la recogida de los contenedores de pilas usadas, depositándolas posteriormente en contenedores de mayor tamaño a disposición del sistema Integrado de Gestión para su posterior traslado a las plantas de separación y/o reciclado.
Proporciona el marco (normativo y funcional) necesario que permita la recogida selectiva de pilas y baterías usadas en su ámbito territorial y de acuerdo a lo dispuesto por la Comunidad Autónoma.
Está obligada a aceptar libre de gastos, la devolución de las pilas usadas de los usuarios finales y de los distribuidores.
También tiene potestad legislativa-sancionadora para aquellos que no cumplan adecuadamente sus obligaciones.
– La Administración Central autoriza la puesta en marcha del Sistema y ordena la participación de todos los agentes para que se cumplan los fines previstos.
Participa en el Protectorado de la Fundación del Sistema Integrado de Gestión en funciones de gestión.
– El Sistema Integrado de Gestión es el responsable ante las Administraciones Públicas competentes del correcto funcionamiento del Sistema de recogida y reciclado de pilas usadas.
Realizará la recogida de las pilas y baterías usadas desde los puntos de almacenamiento y/o clasificación fijados por las Administraciones Públicas, hasta las plantas de tratamiento. También se responsabilizará de las operaciones de tratamiento de estos residuos.
Fuente: Asociación Multisectorial de Empresas Españolas de Electrónica y comunicaciones