Espelta. Un cereal amigo

Publicado: 06/02/2007 - Actualizado: 27/05/2016

La reputación de los pasteles y todos los panes de alguna forma ha ido empeorando cada vez más debido a que, entre otras cosas, se dice que engordan. Atinada consideración si tomamos en cuenta que la mayoría de los panes (harinas) que se consumen han sido refinados en su elaboración. De la misma forma que sucede con la mayoría de los productos procesados, los cereales pierden en su refinamiento cantidad de nutrientes y valores alimenticios los cuales convierten el alimento en algo “inflado o sintético” que al ser ingerido no solo “infla” sin nutrir, sino que roba en su proceso de digestión energía al cuerpo, ya que un alimento escaso en vitaminas y minerales se convierte en el estómago en un bolo sin nutrientes que necesita ser eliminado, y la eliminación necesita de vitaminas y minerales para su ejercicio. Y no sólo los cereales procesados restan los nutrientes al cuerpo sino que lo peor es que la mayoría de panes y calorías refinadas engañan al organismo porque dan la sensación de saciedad, motivo por lo cual es fácil preferirlos en lugar de aquellos panes no refinados y de verdadero valor nutritivo, como el de centeno, el de cebada, el de avena o el de espelta.

La espelta, cereal poco conocido pero que cobra fuerza actualmente, es una variedad de trigo utilizado antiguamente por diversas civilizaciones y ha sido de alguna forma rescatado por aquellos interesados en la cuestión alimenticia, ya que es un cereal que no solo posee altos valores nutritivos, sino que es de sabor agradable y puede ser utilizado de muchas formas.

La espelta se utiliza, igual que el trigo común, para elaborar pan, galletas, harinas y hasta cerveza. Esta es una planta que posee propiedades extraordinarias en la asimilación de sus nutrientes, tiene la particularidad de que no ha sido manipulada ni “cruzada” con otras especies, por lo que se le considera pura. Respecto al trigo común la espelta posee un mayor porcentaje de proteínas, minerales, vitaminas, y además aporta los ocho aminoácidos esenciales, cuestión de importante consideración para las personas vegetarianas que no obtienen aminoácidos de productos animales. La espelta aporta  magnesio, hierro, fósforo, vitamina E, vitamina B y betacaroteno. Es ideal para que la consuman personas alérgicas al trigo natural, y, por su abundante fibra, la espelta es un excelente alimento para tratar el estreñimiento y consentir al estomago e intestinos, purificando sangre y tonificando el bazo y el páncreas. La grasa que contiene la espelta es del tipo insaturado, no contiene colesterol y es rica en ácidos grasos esenciales que el cuerpo necesita ingerir ya que el mismo no los puede sintetizar y son indispensables, entre otras cosas, para el buen funcionamiento cerebral. Hay que señalar que la espelta si contiene gluten como el trigo.

La espelta contiene glúcidos particulares (mucopolisacáridos) que juegan un papel importante en la coagulación de la sangre y estimulan el sistema inmunitario.

La espelta tiene un sabor es suave y dulce, ha sido utilizada para crear harinas pero puede ser consumida como un vegetal en ensaladas, de hecho consumirla en germinado provoca que sus propiedades se intensifiquen.

Se puede utilizar para elaborar pastas Alimenticias, pizza, repostería, paté, tortillas, etcétera. Aquí te compartimos dos recetas fáciles para que puedas consumir la espelta de dos formas deliciosas, y mientras la disfrutas puedes pensar que tu organismo se fortalece y, sobre todo, te lo agradece.

Panquecitos de zanahoria

Ingredientes

• 225 gr. de azúcar mascabado
• 4 huevos
• Trocitos de nuez (al gusto)
• 200 gr. aceite de oliva
• 10 gr. canela molida
• 250 gr. harina integral de espelta
• 1 sobre de levadura
• Un poco de mantequilla
• 200 gr. zanahoria

Elaboración:
Se mezclan todos los ingredientes, excepto la zanahoria. Una vez bien integrado todo lo dejamos reposar. Mientras, pelamos y picamos (o rayamos) la zanahoria, la incorporamos al resto de los ingredientes, y la mezclamos bien. Añadimos la masa a moldes previamente engrasados con aceite o mantequilla, se ponen dos cucharadas en cada molde, recordando que “suben” con el calor. Metemos los moldes al horno a 180ºC durante 20 o 25 min. Aproximadamente. Puedes agregar, antes de meterlas al horno, pasitas, almendras, o espolvorear amaranto para decorarlas.

Ensalada Bosque

Ingredientes

• Media lechuga
• Un tomate
• Brócoli (previamente cocido y cortado en arbolitos)
• Nuez picada
• Espelta en germinado
• Aceite de oliva
• Media taza de ajonjolí (sésamo)
• Limón (al gusto)
Condimento vegetal en polvo

Elaboración:

Lava y desinfecta todo muy bien. Corta la lechuga en tiritas y colócala extendida en un platón. Encima coloca el germinado. Coloca encima los arbolitos del brócoli y las rodajas de tomate. Espolvorea la nuez encima. En un molde aparte exprime el jugo de entre 3 a 6 limones. Agrega dos cucharadas de aceite de oliva, el ajonjolí, sal y condimento vegetal (al gusto). Mezcla bien y viértelo encima de la ensalada justo cuando la vayas a servir.

Acerca del autor
  • K. Laura Garcés G

    Escritora, terapeuta y conferenciante. Es una amante de la medicina natural y del poder de la mente y las emociones en el cuerpo y la vida.  Además, ha estudiado nutrición y desarrollado dietas apropiadas para apoyar este proceso de curación.Ha escrito más de 1500 artículos en revistas de España y México, ganadora de dos concursos literarios. Linkedin