Leche materna o fórmula, cuál escoger
Actualmente, son más las madres que deben trabajar inmediatamente después de dar a luz a sus bebés; otras están con ellos por licencia temporal y luego deben retornar a sus labores fuera de casa y otro porcentaje de mujeres, que por ser primerizas se llenan de nervios y sienten que no tienen leche para amamantar. En los tres casos surge la pregunta, ahora qué le doy a mi bebé, ¿será la fórmula igual a la leche materna, cuál será su alimentación ideal?
No te marees, por más que en el mercado existan miles de fórmulas publicitando sus grandes bondades, sus ricos nutrientes y lo último en vitaminas para tu niño (a), la leche materna sigue siendo la mejor alimentación para el recién nacido. Lo dicen los médicos, los pediatras y todo profesional de la salud involucrado con el cuidado de los niños.
Leche materna, la mejor
Incluso la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el UNICEF señalan que la lactancia "es una forma inigualable de facilitar el alimento ideal para el crecimiento y desarrollo correcto de los niños”.
Debes saber que la leche materna además de contener todos los nutrientes que el bebé necesita para su crecimiento, incluye en su composición los anticuerpos que lo protegen de enfermedades digestivas como la enterocolitis necrotizante, diarreas, colitis, otitis, bronquiolitis, entre otras.
Lo primero que debes hacer entonces, al tener a tu bebé en brazos, tras la media o primera hora del parto, es ofrecerle el pecho, de este modo, no sólo estimulas el reflejo de succión del bebé, sino inicias el contacto piel con piel, un lazo de amor y protección tan fuerte y vital para un crecimiento sano en tu hijo, pues con tu calor, él se siente, siempre, protegido y seguro.
Lactancia a demanda
La clave para que tu leche no se corte y mantenga siempre satisfecho a tu bebe, es que lo amamantes a demanda, no establezcas horarios, dale el pecho cada vez que él lo requiera, así te parezca que recién se lo acabas de ofrecer y/o que haya lactado apenas 15 minutos antes.
Para alguna primerizas, allí empieza el dilema o problema, pues creen erróneamente que porque su bebe quiere estar pegado a su pecho todo el tiempo, que ellos están “insatisfechos” que “no se llenan” o que ellas son incapaces de alimentarlos adecuadamente.
Recuerda que si tu bebé continúa succionando “la teta”, no sólo es una respuesta por querer satisfacer su hambre, sino que lo hace por apego, por un fuerte vínculo sentimental hacia ti. En ese momento no es necesario que incorpores fórmula a su alimentación, a veces el niño sólo quiere “juguetear” con el pezón de mamá, no hay nada más gratificante para ellos.
No tengo leche
Muchos especialistas, sino todos, coinciden en que no es posible que una mujer diga “no tengo leche” para amamantar, es más es considerado un mito o una farsa, que esconde muchos miedos internos al haber sido madre por primera vez. Deja de estresarte y relájate. Según el médico blogger, José recoba “si la naturaleza dio mamas a la mujer es para mamar y hasta ahora no existe mujer que no esté naturalmente dotada para dar de lactar”.
Así que sólo aliméntate bien, come mucha la lactosa le puede afectar a tu bebé, toma leche deslactosada o leche de soya.
Otras de las preocupaciones de las madres para justificar el consumo de fórmulas como alimentación mixta en el bebé, es que ven a ss hijos muy “flacos” en comparación a otros de su edad que son alimentados con leche artificial.
Según la OMS generalmente “el niño que toma la lactancia no se interrumpa y que cada vez tengas más leche que dar es ofreciéndole el pecho a tu bebé, pon atención: a más succión, más producción.
Cómo empiezo
Cuando el bebe haya terminado de vaciar la leche de un seno, ofrécele el otro, generalmente demora entre 15 o 20 minutos por uno.
Y no te preocupes si nuevamente, dentro de un corto tiempo, tu bebé quiere más leche, pues cuanto más vacío se encuentre el pecho, más rápidamente se activa la señal de producción de leche. Por el contrario, si la mamá espera que se le llenen los pechos de leche puede ser que la señal activadora de la producción disminuya, disminuyendo también la producción de leche.
Con la lactancia tu bebé no necesitará que incluyas otro tipo de líquidos en su alimentación no es necesario ni recomendable ofrecerle agua ni otro tipo de soluciones, por lo menos hasta los seis meses.
Debo ir al trabajo
Si se acabó tu licencia post natal y debes volver al trabajo, organízate, será difícil y un tanto triste tener que ausentarte de casa y dejar al bebé, pero ello no significa que lo “destetes”. Sácate la leche con ayuda de una pesonera o sacador de leche. Existen de todos los tipos en el mercado, desde manuales hasta eléctricos, escoge el que más te acomode. Déjalo refrigerado en recipientes de vidrio para que estén más higiénicos. La leche congelada puede durar hasta más de tres meses en el congelador y un día en una nevera normal. Consulta con tu médico sobre ello.
Que tu ausencia en casa, no signifique el rompimiento de la lactancia, volviendo luego de tus labores, puedes reanudar tus vínculos con el bebé, que esperará ansioso por sentir tu calor y tu pecho, otra vez.
Las fórmulas, opción no idónea
Cada vez la industria de la leche maternizada va en crecimiento, pues son más las mamás que deciden no dar de lactar a sus hijos. Las hay de todo tipo, de bebé, lo hacemos pasar por etapas poco gratas, como el estreñimiento, cólicos, gases, regurgitación, diarreas, entre otros. Por el contrario, la leche materna es el alimento ideal que lejos de producirle un efecto negativo al bebé, lo beneficia y lo prepara para un óptimo desarrollo, tanto en lo físico como en lo neurológico.