Limpieza Facial, necesaria para tu Piel
La limpieza facial es uno de los aspectos que no puede faltar en nuestra rutina para el cuidado de nuestra piel. Para obtener mejores resultados, es importante que identifiques el producto que es más adecuado a tu tipo de piel.
Si tú quieres aplicarte un tratamiento de belleza, o bien, si quieres tener un cutis sano, es importante que siempre realices una limpieza facial previa. Diariamente, estamos expuestos a los efectos del sol, la contaminación, el propio maquillaje, el tabaco, y otros elementos que castigan y ensucian nuestra piel. Es por ello, que es necesario una buena higiene que debe ser diaria, para eliminar la suciedad y residuos de la piel, devolviéndole su apariencia sana.
¿Qué producto me conviene?
Cuando queremos limpiar nuestra piel, generalmente optamos por agua y jabón, lo cual es adecuado para la limpieza corporal, pero nuestro rostro es más delicado. El producto de limpieza para ti, va a depender de tu tipo de piel.
Piel grasa: Muestra poros grandes y abiertos, los productos para su limpieza recomendados, son los geles y los jabones para el rostro.
Piel seca: Este tipo de piel presenta tirantez, y tiende a la formación de escamas y arrugas, le van bien las leches limpiadoras.
Pieles sensibles: Tiende a irritarse fácilmente, para su limpieza se requiere de un producto especial para pieles sensibles, con el fin de evitar alterar la barrera hidrolipídica de la piel.
Por la mañana y la noche
Para realizar una limpieza facial correcta, se sugiere que lo hagas dos veces al día, por la mañana y por la noche preferentemente, y además, esto debe formar parte de una rutina diaria, independientemente de sí uses maquillaje o no, de si saliste o no, es importante, adquirir un hábito incluso desde jóvenes (desde la adolescencia).
Pasos de una limpieza facial
- El primer paso consiste en utilizar el producto que se adapte a tu piel para su limpieza, geles, espumas, leches, jabones etc.
- Luego procura utilizar agua tibia para enjuagar y seca tu rostro con ayuda de una toalla dando suaves golpecitos, sin frotar, para no irritar la piel.
- Aplica un producto para cerrar los poros, y calmar la piel
- Una vez que el producto anterior se haya absorbido, se recomienda utilizar una crema hidratante con protector solar para el día, o bien una crema hidratante para la noche. No olvides el contorno de los ojos (con una crema adecuada) y la zona del cuello.
Peeling, para una piel muy maltratada
Se trata de un tratamiento que consiste en aplicar sustancias químicas que permiten eliminar de forma controlada una capa de la piel muy superficial, y de tal forma conseguir estimular la renovación celular.
Se suele recomendar cuando existe un exceso de células muertas en la superficie de nuestra piel, o cuando hay alguna alteración en la estructura de la epidermis. Las pieles fotoenvejecidas, hiperpigmentadas, rugosas, apagadas o con acné.
Los resultados del peeling son favorables, la piel luce más sana luego de éstos procedimientos, pero es importante que consultes con un profesional para saber cuál tipo de peeling es más apropiado para ti, hoy en día también puedes encontrar opciones de “peelings” naturales.
Recomendaciones
Procura elegir productos de calidad, recuerda que aunque sea una inversión extra, son más duraderos y sus fórmulas convienen más que lo más económico.
Si encuentras puntos negros y/o espinillas, no trates de presionarlos con tus dedos, ya que esto puede infectar la zona, y también maltratar la piel, procura utilizar un producto para retirarlos, o tratar el acné, o bien, consultar con tu dermatólogo.
No olvides que esta rutina de limpieza debe ser diaria y tu piel te lo agradecerá y lucirá radiante.