Niños que se comen las uñas

Publicado: 01/06/2012 - Actualizado: 04/09/2018

¿No sabes qué hacer para que tu niño (a) deje la manía de morderse las uñas?,  ¿estás todo el tiempo detrás de ella o él para regañarlo cada vez que lo hace?, pues con estas actitudes lo único que estás logrando, es reforzar la manía de tu hijo y alargando el hábito, que podría acompañarlo (a) hasta la adolescencia, incluso la adultez.

¿Porque los niños se comen las uñas?

Según indican los pediatras, es común que los niños inicien este hábito, entre los dos o tres años de edad, ya sea por tensión, nervios, curiosidad u otro tipo de ansiedad. A través de los mordiscos ellos se alivian, se relajan, sobrellevan el estrés y así como un día lo aprendieron hacer, otro día simplemente, sin mucho aspaviento, lo olvidarán.

Está comprobado que todos los niños sienten ansiedad, cuando aprenden algo nuevo, cuando los cambian de escuela o si sienten vergüenza de acercarse a otros niños de su edad en una fiesta o en el parque. La clave está en que los padres logren un acercamiento con sus hijos hasta descubrir, de manera natural sin forzarlos, la causa que los empuja a lastimar sus deditos y sus uñas.

Hasta descubrir o reconocer en qué situaciones lo hace, no debes recriminarlo, ése es un hábito inconsciente tan igual que un tic nervioso. Es más ni siquiera el niño sabe o reflexiona por qué lo hace. Castigarlo por ello o recriminarlo, instándolo a que deje de hacerlo, no te servirá de mucho, más bien lograrás que se vuelva un niño inseguro por los reproches.

Cambio con amor

Lo que sí debes hacer es buscar el dialogo amistoso con él, explicándole los perjuicios que le pueden ocasionar en su piel el comerse las uñas. Diciéndole que lo aman mucho y no les gusta la idea de que se lastime, que se provoque heridas.

Cada vez que su hijo intente morderse las uñas, alértelo para que sea consciente, pero no como sermón. Por el contrario cuando te diga que por un gran lapso de tiempo lo ha controlado, felicítalo, festéjale el gran avance. Si es niña puedes alentarle con un premio, si logra crecer normalmente sus uñitas, puedes pintárselas el fin de semana del color que ella quiera. En caso de que sea niño podrías anunciarle que comprarás un lindo cuento con pegatinas para que él mismo las despegue sin problemas, ni ningún dolor por alguna herida.

Algunos recomiendan que si fuera el caso podrías aplicarle un esmalte inocuo de sabor desagradable para quitarle el hábito, sin embargo puede ser que tu niño lo tome como un castigo y podría haber retroceso en lo avanzado, ello dependerá del grado de confianza que tengas con él para que lo pueda entender.

A cada niño le funcionará una técnica diferente, como padres nos toca elegir cuál le puede funcionar mejor, pero recuerda que  no debes criticar ni exponer al ridículo a tu hijo por tener el hábito de la onicofagia, como también es llamada la acción de morderse las uñas.

No olvides que tu hijo no es el único, se calcula que aproximadamente entre el 40 y el 45 por ciento de los menores de edad se muerden las uñas y la mayoría superan esta costumbre con la edad.

Asimismo debes hacer  un análisis de cómo está creciendo tu hijo, si tu hogar le está proveyendo de toda la comprensión y atención que requiere. Muchas veces el problema no es él, sino de la conducta de los padres y de cómo lo están tratando. Si es un niño con miedos, con angustia, porque ve a sus padres pelear todo el tiempo, puede ser un detonante para que se coma las uñas y desencadene en otras conductas de mayor cuidado.

Busca ayuda

Si finalmente, pasados los años tu niño no ha podido dejar esta manía y el morderse las uñas va acompañado de otros hábitos como pellizcarse, jalarse los cabellos o las pestañas, es momento de conversar con el pediatra y/o buscar ayuda de un psicólogo.

Acerca del autor
  • S.M. Aiquipa

    Licenciada en Comunicación. Ha complementado su trabajo como periodista con un profundo estudio sobre la dietética y los habitos de vida saludables. Sally tiene una sólida formación en periodismo y grandes dotes para la comunicación. Es capaz de explicar de forma clara, sencilla y entendible conceptos complejos o estudios científicos de alto nivel. Perfil en Linkedin.