Novedosas formas de hacer Dieta en Primavera
La primavera, anuncio del cálido verano, está por llegar. Y muy pronto los días templados comenzarán a vestir el cuerpo con nuevas prendas. La primavera es un buen momento para ir preparando poco a poco la calurosa entrada de los días dorados del verano.
Si bien una dieta equilibrada es necesaria de conservar durante cualquier época del año, durante los días de frío podría decirse que es normal excederse en el consumo de productos y alimentos grasosos o con un alto contenido de carbohidratos, debido a que éstos proveen energía y un recubrimiento especial al cuerpo volviéndolo un lugar térmico, con mayor retención de calor. Todo parece marchar sobre ruedas, sin problemas ni preocupaciones, mientras en el invierno comemos chocolates, embutidos y demás, y mientras el cuerpo está tapado con abrigos y ropa gruesa hasta el cuello.
Más apenas basta sentir los primeros días cálidos que despiden el invierno, para que los resultados de estos excesos se hagan muy evidentes. Entonces comienza a surgir cierta impaciencia por querer deshacerse de esos kilos ganados en el invierno.
En realidad no hay que correr ni desesperarse. Si bien los kilos ganados pudieron haberse evitado siguiendo un adecuado comportamiento alimenticio en invierno, nunca es tarde para comenzar a moldear al cuerpo. Así que mientras la primavera va evacuando el frío del invierno, nosotros podemos tener un tiempo muy accesible para despedir esos excesos marcados en el cuerpo.
En realidad seguir una dieta eficiente no es cosa tan simple. Las dietas rápidas y generales por lo general no abarcan todas las necesidades individuales de un organismo, y pueden llegar a desgastarlo de una forma severa, siendo que los resultados pueden ser muy pobres y estresantes. Por eso, ignoraremos la impaciencia por querer perder kilos y nos enfocaremos en que conozcas nuevos y eficaces métodos para hacer dietas, de manera que además de lograr resultados muy positivos, tu salud y todo el estado general de tu cuerpo se equilibre, restablezca y purifique. Y entonces tu dieta no sólo servirá para que luzcas mejor, sino para que te sientas de maravilla.
Actualmente las dietas se basan en estudios muy elaborados con el paciente, de manera que el diseño de la dieta se ajuste lo más adecuadamente posible a las necesidades, brindando un resultado sorprendente. Entre las nuevas dietas que han surgido y llamado la atención, está la nutri-genética y la dieta de la zona, que a continuación explicamos detalladamente.
Nutri-genética
Entre las novedosas formas de elaborar dietas está la nutri-genética. Esta es una forma de elaborar una dieta tomando en cuenta las posibles alteraciones en los genes que predispongan al organismo a sufrir de obesidad o sobrepeso. En la actualidad se ha descubierto que existen nueve genes relacionados con la propensión y aparición de la obesidad. Para elaborar una dieta nutri-genética es necesario, en primer lugar, hacer una historia clínica completa del paciente, hacer una encuesta acerca de su dieta y vida nutricional en general, y una valoración de sus hábitos alimenticios. Luego se hace un análisis del componente genético del consultante a través de un pinchazo en el dedo índice. Una vez analizado detalladamente el caso particular del paciente, se procede al diseño de un tratamiento dietético personalizado. El tratamiento y la dieta requieren de un seguimiento regular.
Para seguir una dieta nutrigenética, es necesario un especialista en el área, y estar dispuestos a modificar algunos hábitos y costumbres de nuestra vida.
La dieta de la zona
Esta dieta se basa en la necesidad de ingerir los carbohidratos, proteínas y grasas en un proporción exacta y equilibrada de 40-30-30, respectivamente. Esto equivale a decir que el 40% de las calorías de cada comida tiene que derivar de los carbohidratos, el 30% de las proteínas y el resto, el otro 30% , de las grasas. La correcta combinación de estos micronutrientes en las comidas, aunado a un aporte diario de ácidos grasos Omega 3, da como resultado un equilibrio hormonal muy eficiente el cual induce respuestas que ayudan no sólo a prevenir la aparición de enfermedades, sino a la tan buscada pérdida de peso. Aunque dicho tratamiento es progresivo, y va aportando poco a poco un bienestar a nivel físico, mental y hasta emocional, se pueden percibir los resultados desde la primera semana de seguido el plan dietético.
Cómo seguir estas dietas de una forma eficiente
Antes de iniciar cualquier dieta, es necesario visitar a un dietista especialista en este tipo de dietas, para que sea él quien determine el régimen en función de tu organismo y tus necesidades. Es importante que la finalidad de una dieta no sólo sea “el bajar de peso a como de lugar”, sino que se tenga una comprensión más amplia de cómo funciona el cuerpo para que este no resienta ni se debilite.
Recuerda que estás a muy buen tiempo, así que puedes ir escogiendo la dieta que mejor te guste y convenga.