Plantas, medicinas en tu jardín
Las plantas han sido empleadas desde tiempos antiguos para tratar distintos males, gracias al conocimiento que se generó en torno a estas por medio de la experimentación dio lugar a la iniciativa de conservar estas plantas cerca del hogar, y cultivarlas en nuestro jardín.
Recientes estudios además han demostrado que tener estas plantas en tu jardín y cerca de ti, pueden ayudar a mejorar tu estado de salud, sin necesariamente consumirlas. Algunas plantas que puedes cultivar son las siguientes:
Aloe vera o sábila
Bueno para la piel y cabello, son muchos los remedios en los que el aloe vera puede resultar de mucha utilidad. Un estudio ha demostrado que las heridas sanan 8 veces más rápido cuando se tratan con ésta planta, puedes obtener buenos resultados, cortando un trocito de la planta, extraer su pulpa y utilizarla directamente sobre la piel.
Para cultivarla: Ésta planta requiere de un clima templado, sin embargo, es poco exigente, ya que resiste muy bien a las plantas y no requiere mucho riego. Cultiva la planta de aloe vera en arena o tierra arenosa, preferiblemente en una maceta de barro, en el fondo coloca un drenaje de dos centímetros de grava. Debes plantar bien la raíz, hasta el nacimiento de sus hojas. Por último procura que esté expuesta al sol, ya que requiere de bastante sol, recuerda protegerla del frío durante el invierno.
Salvia
Utilizada en la cocina, la salvia también goza de propiedades medicinales, con la salvia se pueden realizar enjuagues bucales efectivos contra el dolor de garganta y amigdalitis. Para prepararlo, agrega sólo es necesario que agregues una cucharadita de ésta planta fresca picada, en una taza de agua caliente, y deja reposar durante 10 minutos, con el resultado, enjuaga tu boca.
Para cultivarla: Puedes plantarla la salvia en una maceta, aunque requiere de sol, si está en tu jardín, demasiado sol puede dañarla, por lo que es importante que se halle a media sombra, si la colocas en el interior, déjala cerca de una ventana. No la riegues con abundancia, procura regarla con frecuencia pero ligeramente.
Tomillo
Una infusión de tomillo sirve muy bien para la congestión en el pecho. Es rico en timol y carvacrol dos sustancias que ayudan a aminorar las molestias, ayudando a minimizar las contracciones de los bronquios, prepara una taza de agua caliente con una cucharada de tomillo, cuela y bebe.
Para cultivarla: Es una planta que no requiere de muchos cuidados, el tomillo crece con facilidad en terrenos secos, y rocosos. Requiere de bastante sol, por lo que es recomendable, dejarlo directamente al sol, o a media sombra, evita que esté en terrenos húmedos o encharcados.
Menta piperita o hierbabuena
Una planta aromática, reconocida por sus beneficios digestivos. Su extracto se utiliza para combatir los síntomas del Síndrome de intestino irritable, pero una infusión de hojas frescas de menta puede ayudarte a recuperarte de un dolor estomacal o indigestión.
Coloca 6 hojas frescas de menta en una taza de agua hirviendo y deja reposar durante diez minutos, bebe el té.
Para cultivarla: Puedes cultivarla en tu jardín o en una maceta, ésta planta requiere de sol, así que busca un lugar soleado para colocarla o media sombra. Debes evitar los suelos que se encharcan aunque es necesario regarla con regularidad, puedes ir cortando algunas de sus hojas para ir controlando su crecimiento, es de fácil mantenimiento.
Melisa, Toronjil o citronela
Se trata de una planta de la familia de la menta, que posee propiedades antivirales, y puede ser útil en el tratamiento de herpes labial, prepara una infusión con hojas de melisa, y deja reposar, humedece un algodón en la infusión y deslízalo sobre la zona afectada.
Para cultivarla: Procura cultivarlo en una maceta, para que puedas controlar su crecimiento, de adapta bien a cualquier tipo de suelo. También requiere de suficiente luz, pero lo más recomendable es colocarla a media sombra, ya que la luz muy intensa podría dañarle.