¿Qué es la agricultura ecológica?
La agricultura ecológica debe concebirse como parte integrante de un sistema de producción agraria sostenible y como una alternativa viable a un enfoque más tradicional de la agricultura. Desde la entrada en vigor de la legislación comunitaria sobre agricultura ecológica en 1992 , se cuentan por decenas de miles los productores que han optado por este sistema de producción, como consecuencia del mayor conocimiento por parte de los consumidores de los productos derivados del cultivo ecológico, y de una demanda creciente de los mismos.
La agricultura ecológica se diferencia de otros sistemas de producción agrícola en varios aspectos. Este tipo de agricultura favorece el empleo de recursos renovables y el reciclado en la medida en que restituye al suelo los nutrientes presentes en los productos residuales. Aplicada a la cría de animales, regula la producción de carne y aves de corral prestando particular atención al bienestar de los animales y a la utilización de piensos naturales. La agricultura ecológica respeta los propios mecanismos de la naturaleza para el control de las plagas y enfermedades en los cultivos y la cría de animales, y evita la utilización de plaguicidas, herbicidas, abonos químicos, hormonas de crecimiento y antibióticos, así como la manipulación genética. Como alternativa, los productores recurren a una serie de técnicas que contribuyen a mantener los ecosistemas y a reducir la contaminación.
Medidas de control
Los procedimientos de aplicación de dichos Reglamentos revisten asimismo gran importancia, ya que garantizan que todos los productores que alegan cumplir los requisitos para ser considerados agricultores ecológicos, estén inscritos en el organismo de control competente de su país. A su vez, tales organismos han sido designados por autoridades encargadas de comprobar su capacidad para administrar los regímenes de forma justa y eficaz. y están sujetos a la reglamentación por ellas establecida.
El control abarca todas las fases del proceso de producción, incluido el almacenamiento, la transformación y el envasado. Una vez al año, como mínimo, se realizan inspecciones en las explotaciones, y también tienen lugar controles sin previo aviso. En caso de infracción a las normas, está prevista la aplicación de sanciones que incluyen, entre otras cosas, la supresión inmediata del derecho a alegar la condición de ecológico en relación con el producto de que se trate; dichas sanciones pueden endurecerse cuando el incumplimiento reviste mayor gravedad. Los productores agrarios están obligados a mantener un registro meticuloso de sus actividades y, en el caso de los ganaderos, llevar registros completos de sus sistemas de gestión del ganado.
Efectos beneficiosos de la Agricultura Ecológica sobre el Desarrollo Rural
La agricultura ecológica y la agricultura integrada brindan asimismo auténticas oportunidades a distintos niveles y contribuyen a la revitalización de las economías rurales a través de un desarrollo sostenible. El crecimiento del sector de la agricultura ecológica está ofreciendo ya claramente nuevas oportunidades de empleo en ámbitos tales como la producción, la transformación y los servicios afines. Además de las ventajas de tipo ambiental, estos sistemas de producción agrícola pueden aportar importantes beneficios en términos económicos y de cohesión social de las zonas rurales.
Fuente: Comisión Europea