Té rojo Pu-erh … Elaboración, Origen e Historia

Publicado: 19/02/2006 - Actualizado: 13/08/2019

En China, país que «inventó» el té, el más selecto es el Pu-erh, que se conoce como «el té de los emperadores», ya que antiguamente estaba reservado a la alta nobleza. Al principio se tomaba sólo como bebida placentera; y fue la dinastía Tang (618-907 d.C.) la primera en utilizarlo con fines medicinales.

Elaboración del Té Rojo Pu-Erh

El proceso de elaboración de este té se descubrió casualmente al tratar de alargar la conservación del té verde. Lo sometieron a una fermentación especial que lo hacía más resistente, y este proceso le añadió nuevas propiedades curativas. Desde entonces, el té Pu-erh se considera como el té de la salud: actúa sobre las energías que regulan las funciones del cuerpo y los experimentos científicos más recientes indican que debido a su fermentación es un té muy bajo en ácidos tánicos, lo que significa que las personas con estómago delicado lo pueden beber sin problemas.

Aunque el «secreto» de elaboración del té Pu-erh no se ha desvelado totalmente, se sabe que sus grandes hojas verdes son comprimidas y almacenadas en cavernas durante muchos años (pudiendo llegar a 60 años) en condiciones muy concretas para su maduración. El color rojo, que adquiere tras reposar seis décadas, procede de la fermentación de las hojas de la planta del tipo Camellia sinensis, conocida también por «dayeh». Durante este tiempo, las hojas adquieren un tono rojo intenso. La fermentación, al contrario del té verde, no se produce por la acción de las enzimas, sino que es llevada a cabo por unas cepas de virus que le dan su tono cobrizo particular.

Los especialistas clasifican el Pu-erh como un té posfermentado, lo que indica que pasa por un proceso de maduración posterior similar a la fermentación del vino. Para diferenciado del té verde y del té negro, y a causa de su color rojo subido (marronoso), el Pu-erh también se denomina té rojo.

Las propiedades curativas de este té, originariamente verde, hicieron que fuera incluido en la lista «China Native Products Thesaurus», convirtiéndose en uno de los tesoros de este país oriental.

Yunnan, donde el té rojo crece

El té Pu-erh se recolecta en Yunnan, provincia del sur de China situada junto a Vietnam, Laos, Birmania y el Tíbet, desde hace milenios. Conocida como la «región de la eterna primavera» tiene un clima especialmente propicio para el cultivo del té, sobre todo en las regiones montañosas, en las que las lluvias casi metódicas y una temperatura templada, de unos 20°C constantes y sin heladas, hace que el árbol del té rojo crezca con singular exuberancia.

Quienes conocen Yunnan afirman que es una de las regiones más bellas de la Tierra y la única en la que puede cultivarse el Puerh, pues se ha demostrado que al trasplantado a otro lugar se alteran sus propiedades medicinales.

Yunnan es una de las provincias más grandes de China, con una superficie algo superior a dos tercios de la extensión de España. En esta región se encuentran todo tipo de zonas climáticas, desde regiones tropicales hasta la alta montaña, con cumbres de más de 6000 m de altura. El árbol de té Qingmao crece sobre todo en las regiones montañosas de un clima templado, sin heladas y con precipitaciones regulares durante todo el año, pero se encuentra también en alturas que pueden llegar hasta los 2000 m. Las mayores superficies de cultivo están situadas alrededor de la montaña Liuchashan y en el distrito I'bang, en el sur de Yunnan.

Con su extraordinaria y variada flora, Yunnan es uno de los paisajes más bonitos del mundo. La mayoría de las plantas medicinales usadas en la medicina tradicional china provienen de esta zona montañosa, que todavía está libre de la contaminación industrial. El elevado grado de eficacia de las plantas medicinales de Yunnan se explica por la fuerte energía que caracteriza a las plantas de esta región. Kunming, la capital de la provincia, con más de tres millones de habitantes y muchos institutos de investigación, se considera el centro de la medicina tradicional china, que tiene un número creciente de seguidores en Europa y Estados Unidos. En los años setenta un grupo de médicos de Kunming fueron los primeros en documentar con estudios clínicos que el té Pu-erh es capaz de reducir el nivel de colesterol de la sangre.

En Yunnan, cerca de la montaña Uuchashan, se encuentra un árbol dayeh que tiene más de mil años y del cual aún se extraen hojas de té de excelente calidad. Estos árboles tienen ramas muy fuertes y unas hojas muy grandes de color verde brillante.

En China se viene cultivando el té desde los inicios de la dinastía Han (aproximadamente alrededor del año 200 a.c.), pero hay documentos que demuestran que ya se bebía en el año 2737 a.c. La planta de té tiene hojas ovales y alargadas que acaban en punta; son siempre verdes y están colocadas de forma alterna. Las flores tienen cinco pétalos de color blanco y emiten un fuerte olor; las frutas son triangulares y lignificadas.

El nombre del té rojo proviene de la prefectura «Pu-erh», en el distrito Simao, en el sur de Yunnan. En cantonés es denominado «Bolei». Hay indicaciones de que algunas variantes se cultivaban de modo que se formaba una capa fina de moho, comparable al moho usado en la producción de algunos quesos de alta calidad. Tal vez sea una explicación para algunos de los efectos curativos del té, ya que existen multitud de hongos con efectos antibióticos.

Extraido del libro "Té Pu-erh y Rooibos" de Iona Purti y Dr. Jörg Zittlau

Acerca del autor
  • Dra. Loredana Lunadei

    La Dra. Loredana Lunadei es especialista en alimentación, dietética y nutrición. Realizó sus estudios en la Universidad de Milán donde obtuvo la licenciatura en Ciencia y Tecnología de alimentos. Posteriormente continuo sus estudios, realizando el doctorado también en dicha universidad. Linkedin.