Tranquilizar los nervios de forma natural
Estar tranquilos es un estado creativo poderoso, es un estado de entendimiento, de conocimiento. Una persona en paz es una persona que sabe disfrutar, que sabe entender lo que siente. Vivir con tranquilidad es un estado emocional al cual muchas personas aspiran, sobre todo en estos tiempos donde se vive tan de prisa y con tanta información y experiencias de todo tipo, y los nervios parecen ponerse de punta fácilmente.
¿Qué genera los estados de intranquilidad?
Hay muchas razones por las que una persona puede caer en estados nerviosos nocivos. Las principales son:
- Una dieta descuidada la cual, al interrumpir la adecuada nutrición del sistema nervioso, provoca toda una serie de degeneraciones y debilidades en este delicado sistema de electricidad del cuerpo.
- Falta de confianza en sí mismo (inseguridad personal) o falta de confianza en la vida y en lo que esta traerá.
- Alto consumo de bebidas estimulantes y productos azucarados, los cuales degeneran de forma lamentable el sistema nervioso.
- La vida sedentaria: la cual provoca una muy mala oxigenación y nutrición del cerebro y todos los sistemas, lo cual influye de manera fundamental en el buen funcionamiento del sistema nervioso.
- Un deficiente entendimiento de lo que son las emociones o la falta de cultura emocional, que es la base para poder manipular la energía de una forma constructiva y/o creativa.
¿Por qué no es conveniente estar tenso, ansioso, desesperado, etc.?
Todas las emociones de tensión y/o dolor en realidad sólo son mecanismos de defensa que suceden para pone alerta a la persona ante una posible amenaza. Las emociones de este tipo son reacciones que generan adrenalina y conducen a estados defensivos, donde el cerebro y todo el cuerpo buscan una solución o un remedio ante la posible amenaza. Sin embargo, mantener la ansiedad, tensión, desesperación, ira, miedo, etc., por tiempos prolongados o constantes puede generar consecuencias muy desfavorables en el cuerpo y mente debido a que todos los sistemas se paralizan, debilitan y agotan, provocando a la larga la mayoría de todas las enfermedades que conocemos.
Y sin embargo, a pesar de las consecuencias que nos generan estas emociones, no debemos negarlas ni huirles o reprobarlas. Sentir es una de las cualidades más hermosas de las que fue dotado el ser humano, el problema es que no se nos enseña qué hacer con aquello que sentimos.
La importancia de saber sentir
Sentir es un don único, es una energía creativa poderosa. Con el sentimiento se crea la realidad. Y sin embargo, la mayoría aprendió a negar o disfrazar lo que verdaderamente siente. Nos dicen: “No llores”, “No te asustes”, “No te enojes”, etc. y estos mensajes que muchos recibieron cuando sentían algo en el fondo sólo nos dejaron un mensaje: “No debes sentir ciertas cosas”. Este entendimiento, a la larga, ha provocado que cuando nos sentimos enfadados, ansiosos o temerosos, en lugar de aprender de la experiencia, nos resistamos o queramos huirle al sentimiento, tratando de evadirlo o evitarlo.
Curar los nervios en lugar de sedar el cuerpo
Para aprender a estar tranquilos es necesario tomar en cuenta todos estos factores, pues no es lo mismo aprender a estar tranquilos y con ánimo y energía para disfrutar y crear lo que anhelamos, que simplemente sedar los nervios con sustancias químicas las cuales no hacen sino empeorar los cuadros nerviosos y deteriorar, a la larga, el sistema nervioso e inmune.
La base de un mundo emocional saludable
Es necesario, como base fundamental de un mundo emocional saludable, empezar por una dieta de calidad, eliminando principalmente productos como el azúcar y harina refinada, procesados y comida chatarra que sólo desgastan la energía del cuerpo, lo debilitan y enferman. Se deben beber jugos de vegetales frescos e incluir nueces, almendras, maní y semillas, en la dieta diaria, así como leches vegetales y pescados, los cuales ayudan a nutrir y mantener el sistema nervioso en óptimas condiciones.
Una dieta de calidad se debe combinar con ejercicio y la buena postura, la cual ayudará a que la electricidad del cuerpo esté en armonía y equilibrio. Hay que mantener la columna bien derecha y el abdomen contraído., sobre todo cuando los estados de estrés e intranquilidad son acentuados.
La respiración juega un papel fundamental. Aprender a respirar de forma pausada y concentrada es de gran ayuda para ayudar a tranquilizar los nervios.
Si te cuesta relajarte, es necesario que te ayudes tomando alguna infusión de alguna hierba tranquilizante como la hierbabuena, la pasiflora, la manzanilla y el anís. Debes tener muy en cuenta que las hierbas potencian sus efectos si se les combina con la dieta, la respiración, el ejercicio y un buen entendimiento de las emociones.
Aceptar y entender el sentimiento
Aceptar lo que sentimos sin juicio es una clave para construir un entendimiento emocional creativo y poderoso. Hay que sentir no como si fuésemos nosotros el sentimiento, sino ver el sentimiento como una forma de reacción de nuestros sentidos y mente. No es que seamos miedosos, desesperados o iracundos. Simplemente lo sentimos. Sentir es un dato informativo, nos revela la forma en la cual estamos enfocando algo. No debemos definir nuestro carácter de acuerdo a lo que sentimos, pues en el momento en que cambiemos la perspectiva, el sentimiento cambiara. Y nuestro carácter cambiara.
Meditar para estar tranquilo
Esto de aprender a vernos de forma separada a lo que sentimos es uno de los aspectos más profundos de la meditación y de un sistema nervioso saludable. Una meditación para relajarte puede consistir en simplemente respirar hondo y, con los ojos cerrados o abiertos, tratar de concentrarte simplemente en el ritmo de tu respiración, tratando de que tu mente se enfoque en la exhalación e inhalación. Este ejercicio meditativo puedes realizarlo en la oficina, en el coche o en una fila muy larga. Notaras cómo te relajas lentamente si logras simplemente seguir el ritmo de tu respiración.
Terapias alternativas para tranquilizarte de forma natural
La práctica del yoga, la acupuntura, los masajes de bioenergía o relajantes son estupendas formas de ayudarte a estar relajado. Pruébalas en caso de que en verdad te cueste estar tranquilo, en verdad notaras como tu cuerpo se libera de tensiones y te ayudas a enfocar la vida desde nuevas perspectivas.