Publicado: 20/10/2009 - Actualizado: 29/09/2018
Autor: K. Laura Garcés G
Una mujer embarazada debe procurar que este momento sea uno de los más placenteros de su vida, de manera que el bebé se desarrolle en las mejores condiciones posibles. La dieta, el ejercicio y disposición mental de la madre son factores indispensables en este periodo para crearle al bebé un ambiente de la mejor calidad, por lo que hay que procurar llegar al embarazo con un cuerpo sano y en el mejor estado de armonía.
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Presión sanguínea alta (hipertensión)
Sin embargo, muchas veces la madre puede padecer enfermedades como la hipertensión, que es una afección nociva y poco prudente en este momento de gestación la cual además es una enfermedad silenciosa que no se nota, y la cual puede sorprender a la madre cuando esta ya quedó embarazada, afección que puede originar en desprendimientos de placenta prematuros, daño renal materno, incomodidad o hasta sufrimiento fetal.
La presión sanguínea alta (hipertensión), es un afección que ocurre cuando la sangre se mueve por las arterias a una presión mayor de la normal. Por lo general, la presión se suele medir con cifras numéricas: 120/80. El primer número se refiere a la presión sanguínea sistólica, y 120 es el valor más alto de la presión sanguínea, el cual sucede cuando el corazón bombea la sangre hacia afuera. El segundo número se refiere a la presión diastólica, la cual es la presión normal cuando su corazón se está llenando de sangre, relajándose entre latidos.
Lo normal es tener una presión sanguínea 120/80, o menor; cuando la presión sube a 140/90 o más, entonces se considera hipertensión; si tiene presión sanguínea entre 120/80 y 140/90, usted tiene algo que se llama "pre-hipertensión".
Una mujer que desea tener un bebé o que ya ha quedado embarazada, debe revisar constantemente que su presión este en condiciones normales. Si acaso se detecta un incremento, la mujer puede ayudarse con muchos remedios naturales que le ayudara a tener y mantener una presión sanguínea normal. Para conocer estos remedios, antes debes saber que es lo que causa la hipertensión:
Causas de presión sanguínea alta
- Peso excesivo: el 90% de los casos disminuye cuando el paciente recobra su peso adecuado. Si estás propensa a la hipertensión, probablemente el aumento de peso que se tiene durante el embarazo pueda disparar esta afección. Por eso, es necesario que revises tu presión constantemente.
- Los estados emocionales como la tensión, ansiedad o presión excesiva, provocan que la presión suba. Por lo general, hay características de personalidad de las personas hipertensas, las cuales tienden a ser perfeccionistas, o muy ambiciosas, criticonas, demandantes, se toman con mucha seriedad la vida, se autoexigen demasiado, o tienen rencores profundos.
- Dieta excesiva en carne y azúcares refinados: la carne, los azucares refinados y embutidos estimulan al corazón y la circulación hasta un 27%, mientras la comida con más abundancia en vegetales frescos lo hace apenas a un 6%. Esto significa que la carne requiere un gasto mayor de energía y trabajo para el cuerpo.}
- Problemas glandulares; un mal funcionamiento de la pituitaria podría causar un aumento en la presión sanguínea, así como puede suceder en las personas que padecen de la tiroides hacer que aumente.
Síntomas
- Por lo general, esta afección no presenta síntomas evidentes, se dice que es una enfermedad silenciosa que se puede hacer evidente en cualquier momento, por lo general se presenta con un problema cardiovascular.
Remedios Naturales para la tensión alta
- Dieta: si las dietas son importantes durante toda la vida, en este momento su importancia se acentúa. Si tienes hipertensión y estas embarazada, lo mejor es que procures eliminar lo antes posible panes y azúcares refinados, carne de procedencia animal así como lácteos de origen animal. Lo mejor es sin duda una dieta balanceada rica en vegetales frescos, verduras al vapor, y alimentos ricos en proteínas y minerales como los cereales. En tu dieta no deben faltar alimentos como las algas marinas, el amaranto, la soja, la levadura de cerveza, el polen, las frutas (sin combinarlas con otros alimentos), las leches vegetales, como la leche de arroz, leche de avena o la leche de sésamo) Todos estos alimentos son ricos en elementos nutritivos y de mucha calidad. Si tienes dudas respecto a tu alimentación, siempre acude a un profesional.
- Relájate: atiende tu mundo emocional y procura leer cosas que te hagan entender la vida de modos distintos, que te procuren más confianza y paz interior. Este, sobre todo, es un buen momento para retroalimentarte con una nueva visión de la vida, con la cual podrás nutrir más tarde a tu bebé. Si te cuesta estar calmada, lo mejor es que acudas a tomar algunas clases como el Yoga para embarazadas o sesiones de hidroterapia o masajes especiales para ti. Esto ayudara a que liberes tensiones y, además, tu cuerpo se relajara y disfrutará haciéndose más elástico y fuerte, lo que puede ayudarte durante el parto. Recuerda que tu actitud mental y emocional tiene mucho que ver con espasmos, dolores y demás.
- Cuida tus riñones: muchas veces, el mal funcionamiento renal es causa de hipertensión. Por lo mismo, debes cepillar bien tu piel (que es un segundo riñón) para ayudarle al cuerpo a depurar las toxinas y grasas excesivas.
- Evita ambientes tensos o irritantes, como lugares ruidosos o común ambiente emocional acalorado.
- Prepara licuados de vegetales frescos como este: licúa perejil, un apio, una taza de jugo de zanahoria y un puño de germinado de alfalfa. Bebe sin colar, mastica de ser necesario. Agrega un poco de agua si lo sientes muy espeso. Este jugo te ayudara a fortalecer tus vasos sanguíneos y es un excelente tónico para tu sistema circulatorio.
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