Ejercicios para rebajar Abdomen y Cintura
Si sientes que tu abdomen esta flácido, abultado o no tienes cintura, sigue esta práctica y eficaz rutina que consta de sólo dos ejercicios, no te tomará mucho tiempo y además no requerirás de aparatos ni herramientas especiales, sólo necesitas ¡un libro! Si la sigues al pie de la letra, te sorprenderás muy pronto de los resultados que te da en corto tiempo. Así que no esperes más, estas a muy buen tiempo de rebajar y tornear el área de tu abdomen para las fiestas decembrinas o para simplemente sentirte bien, observa estos ejercicios y llévalos a la práctica ya sea en la mañana o cuando tengas unos 30 minutos libres aproximadamente.
Antes de empezar la rutina de ejercicios
• Haz un pequeño calentamiento general de tu cuerpo como estiramientos o correr unos 5 minutos.
• No realices estos ejercicios después de comer, debes esperar al menos una hora y media después de haber ingerido alimentos.
• Procura no beber agua durante la sesión sino hasta después.
• Busca un libro en tu casa que pese entre un kilo o dos y que tenga pasta dura. El libro puedes sustituirlo por un ladrillo o por algo rectangular que pese más o menos esto.
• Busca un lugar amplio en tu casa donde puedas trabajar.
Ejercicio número 1 para bajar abdomen y cintura
1. Una vez que hayas calentado tu cuerpo, ponte de pie, piernas estiradas y espalda muy recta. Separa tus pies un poco y sostén el libro con tus dos manos, luego alza tus brazos por encima de tu cabeza y sostenlos estirados, como si el libro fuese un sombrero que te fueras a poner.
2. Ahora, vete inclinando poco a poco hacia el lado izquierdo, sin dejar de estirar los brazos y manteniendo tu cabeza alineada con el libro y mirando hacia el frente. Baja hasta donde puedas, debes de sentir que se estira la parte de la cintura del lado derecho y que tu abdomen lleva la fuerza del equilibrio.
3. Una vez que sientas ya no poder bajar más, gira tu torso hacia la izquierda lo más lento que puedas, sin dejar de estirar los brazos y manteniendo siempre la alineación de la cabeza con el libro. Gira el torso hasta que tu cara quede viendo el piso. Tu espalda debe de estar muy recta y tus brazos deben seguir muy estirados. Durante este movimiento debes de apretar tu abdomen para guardar el equilibrio, y debes además sentir que se estiran al máximo los músculos de la cintura del lado derecho, incluso debes de sentir que los músculos lumbares (situados en tu espalda baja) trabajan.
4. Una vez que estés en esta posición, baja los brazos tratando de colocar el libro encima del suelo pero sin soltarlo. Si no llegas al suelo, debes de esforzarte un poquitín por alcanzarlo o dejar que el peso del libro te jale. Sentirás que se estira la parte de atrás de tus piernas y tu espalda.
5. Ahora, sigue el movimiento de regreso. Sin girar el torso, trata de regresar a la posición anterior, es decir, ve subiendo poco a poco los brazos estirados hasta que quedes alineados con tu cabeza y tu torso y tu cara quede viendo hacia el piso.
6. Ahora, gira el torso muy lentamente hacia la derecha, haciendo fuerza en los músculos de la cintura y los del abdomen.
7. Una vez que conseguiste voltear tu torso hacia el frente, ve subiendo muy lentamente el torso hasta recuperar la posición inicial. Es necesario que lo hagas muy despacio qy que sientas que tus músculos están trabajando.
Una vez que has terminado con este lado, realiza el mismo ejercicio del lado derecho. Si eres principiante, empieza con tres repeticiones, y ve aumentando poco a poco, hasta que puedas hacer 15 repeticiones de cada lado. Si sientes que tus músculos no trabajan mucho, es necesario que aumentes el peso del libro.
Ejercicio 2 para bajar abdomen y cintura
Recuéstate en el suelo. Con tus dos manos sostén el libro encima de la zona de tu vientre a una distancia de 2 cm aprox. Luego, deja caer el libro encima de tu abdomen y trata de contraerlo antes de que este te caiga encima. Ve subiendo la distancia entre el libro y tu abdomen conforme vayas adquiriendo fuerza. Luego, debes realizar el mismo ejercicio pero elevando una pierna y luego la otra, como si caminaras en el aire. Debes hacerlo durante un minuto sin descansar e ir incrementando el tiempo.
Cómo ves, son ejercicios muy sencillos. Si los realizas diariamente y con voluntad, y los complementas tomando medio litro de jugo de verduras frescas con una cucharada de clorofila líquida cada día, y te reservas de comer alimentos que contengan azúcar blanca y lácteos de origen animal, acentuarás y, sin duda, acelerarás los resultados. Tu misma notarás la diferencia.