Un estudio demuestra que los tomates bio son más sanos
Un estudio norteamericano, en el que se comparan los tomates ecológicos con los convencionales, ha llegado a la conclusión de que la variante biológica presenta considerables ventajas en el aspecto de la salud. El estudio, realizado a lo largo de diez años y publicado en el ‘Journal of Agriculture and Food Chemistry’, demuestra que el porcentaje de flavonoides era un 97 % mayor cuando los tomates habían crecido en tierra biológica y con dosis reducidas de fertilizantes.
El análisis, dirigido por Alyson Mitchell, catedrática en toxicología y química de los alimentos de la Universidad de California, y recogido recientemente por la prensa, se basa en una comparativa realizada entre ambos tipos de tomates a lo largo de diez años. Según el estudio, los niveles de los flavonoides quercetina y kaempferol fueron entre un 79 y un 97 por ciento superiores en los tomates ecológicos en comparación con los cultivados de forma tradicional. Otros estudios de este género llevados a cabo previamente con el trigo y las zanahorias no mostraban diferencias entre los cultivados ecológicamente y de forma tradicional. En este estudio, sin embargo, los investigadores han usado los datos de un proyecto a largo plazo en el que se emplearon técnicas agrícolas estandarizadas. En opinión de Mitchell, los hallazgos se basan en la disponibilidad de nitrógeno.
Los flavoniodes o bioflavoniodes son pigmentos vegetales no nitrogenados, cuya función parece ser la de atraer a los polinizadores a la planta. Pero, además, ahora se demuestra que los flavonoides son también un tipo de antioxidantes, capaces entre otras cosas, de eliminar los radicales libres del organismo, e impedir los perniciosos efectos que ejercen en nuestro organismo. Tienen un efecto tónico sobre el corazón, protegen el hígado y el estómago, y muchos de ellos se ha demostrado que son eficaces en el tratamiento de procesos cancerígenos.