Logoterapia: un Sentido a la Existencia Humana
El método logoterapéutico de Victor Frankl esta basado en tratar las enfermedades psíquicas buscando principalmente encontrar en el paciente, por medio del diálogo, qué es aquello que le da sentido a su vida. La palabra “logos” hace referencia al sentido.
Haciendo una comparación con el psicoanálisis de Freud, está técnica es un método menos introspectivo y retrospectivo, ya que se enfoca hacia el sentido y los valores que el paciente desea realizar en el futuro. Aplicando la logoterapia, el paciente se enfrenta con el momento presente enfocándose en el sentido de su propia vida, confrontando su conducta y sentir actual con ese sentido. La terapia se centra básicamente en el caso del neurótico, aquel que pretende evadir, niega o ignora las tareas o misiones concretas de su vida, haciéndole conciente de la importancia de ese sentido como base para superar su neurosis y enriquecer en todo sentido su vida.
¿Cómo es la terapia?
La logoterapia se vale en la mayoría de las ocaciones del psicodrama, una dramatización realizada por el paciente, dónde el terapeuta le pone a pensar y reflexionar con preguntas como: ¿Qué harias si tu vida se acabara en ese preciso momento? Esta dramatización va guiando al paciente a encontrar planteamientos y alternativas, ayudado por el terapeuta con preguntas como: ¿Qué harias o que cambiarías en tu vida si tuvieras una segunda oportunidad? ¿Qué cosas dejarías, iniciarías, dirias, ectétera si te dieran la alternativa de vivir de nuevo? Los cambios que el paciente logre discernir durante esta exploración interior le harán alcanzar su propio "logos" o verdadero sentido de vida.
Su objetivo principal es conducir a la persona a la reflexión y autodeterminación en base a la propia responsabilidad, de manera que este pueda descubriri su sentido de vida individual.
¿De dónde nace esta técnica?
Viktor Frankl, creador de esta técnica para el desarrollo personal, es un médico sobreviviente de los campos de concentración nazi. Su técnica es una variación del método psicoanalítico que intenta sobrepasar la clásica interpretación del inconsciente que se nutre del ello o impulsividad ciega, y colocar en correcta relación la vida orgánica con la vida espiritual o responsable. Freud creía que la neurosis estaba encadenada a episodios de impulsividad reprimida y por tanto su terapia consistía en volver conscientes tales represiones. Esto a través de un proceso de intervención médica conocido como "asociación libre". De ahí la clásica imagen del diván, el paciente y el médico. Lo sorprendente de las investigaciones de Frankl es que descubre un otro elemento del inconsciente: el espiritual. No solamente subsisten en el interior de la conciencia humana una impulsividad natural sino también una espiritualidad natural. La cura de muchos traumas estaría dada por el reconocimiento de tal sustrato y la posterior toma de conciencia es decir, de responsabilidad frente a esa condición. Es que para este médico la espiritualidad no tiene que ver sólo con un ejercicio tautológico de búsqueda de refugio, es un "modo de existir humano”
La Logoterapia se convierte en un instrumento de conexión para el ser humano, puente entre su vida inconsciente y su manera de vivir. No hay nada más enfermizo en el humano que una vida incoherente. Pero no se trata de una incoherencia puramente discursiva, se trata pues de un conflicto mucho mayor entre la conciencia y la responsabilidad. Son las decisiones las que resultan en fracaso o triunfo, y no meramente la voluntad como creía Nietzsche. La fuerza de las decisiones radica en la propia existencia, de tal modo que jamás se puede renunciar a ella. Se trata entonces de una elección consciente o inconsciente, pero decisión al fin y al cabo. Decisión que nos arrastra con todo lo que fuimos, somos, y seremos. (Extracto tomado de Wikipedia)
¿El sentido de vida es algo que se inventa o se descubre?
La búsqueda del sentido de la vida, según la logoterapia, se descubre. Para cada ser humano, el sentido constituye una intención primaria y no una "racionalización secundaria" de sus impulsos instintivos. El sentido es único y específico para cada ser humano ya que sólo cada uno, por sí mismo y por sí solo, puede encontrarlo, satisfaciendo su propia voluntad de sentido.
Viktor Frankl sostiene que el hombre no debería cuestionarse sobre el sentido de la vida sino al contrario, comprender que es la vida la que lo interroga a él. Dicho de otra manera, la vida pregunta por el hombre, lo cuestiona, y éste contesta de la única manera que puede hacerlo: responde de su propia vida y con su propia vida. (Resumen tomado del libro En busca de sentido, Victor Frankl, realizado por francisco Aguirre)
Para más información consulte el libro El hombre en busca de sentido, de Victor Frankl.