Complementos dietéticos en la Menopausia

Publicado: 09/10/2005 - Actualizado: 03/04/2019

En la vida de la mujer hay una etapa llamada Menopausia que se produce a raíz del cese definitivo de la función ovárica o menstruación. Consiste en la falta de secreción de estrógenos y en la ausencia de ovulación regular por parte del ovario.

Climaterio Femenino

El término Climaterio femenino significa todo el periodo de tiempo, que dura desde unos meses a varios años, durante el cuál los ciclos sexuales se hacen irregulares y acaban por desaparecer.
A corto plazo la menopausia tiene consecuencias que afectan al bienestar. Sin embargo a largo plazo, puede provocar problemas médicos más graves.

Los problemas al inicio de la menopausia varían de unas mujeres a otras. Los más comunes son:
Perturbaciones vaso-motoras: oleadas de calor y sudores nocturnos Alteraciones de humor, nerviosismo y a veces depresión, perturbaciones de la concentración y de la memoria.

Las manifestaciones a largo plazo son:

Deterioro de órganos debido a la merma de estrógeno s: aparecen arrugas en la piel, por la pérdida de turgencia.                                         
Infarto de miocardio: Se pierde el efecto protector que los estrógenos efectúan a nivel cardiovascular.
Osteoporosis: Debido a una reducción de la masa ósea, que hace que la mujer sea más propensa a las fracturas de columna, antebrazo y cabeza del fémur. Falta de estrógenos en la mucosa: La mucosa vaginal adelgaza y se atrofia.

Para prevenir todos estos síntomas y manifestaciones vamos a definir la siguiente fórmula:

Extracto de Soja:

La soja es un alimento de alta calidad que se consume principalmente en los países de oriente. Existen numerosos estudios sobre los beneficios del consumo de soja para la salud de la mujer.
Estos beneficios se deben a la presencia de Isoflavonas en la composición de la soja. Las isoflavonas son fitoestrógenos. Se caracterizan por tener en su estructura química un anillo fenólico, que es, no siempre, pero en la mayoría de casos, un requisito para su unión con el receptor estrogénico. Las principales isoflavonas, encontradas en el extracto de soja son genisteína y daidzeína.

Las isoflavonas, además de en la soja, son abundantes en las legumbres, pero también se encuentran en menor cantidad en otras plantas comestibles como cereales, otras leguminosas, frutas y verduras.
El interés suscitado por los fitoestrógenos, parte de la observación epidemiológica, en el sentido que las mujeres asiáticas, cuya alimentación es rica en soja (50 % del aporte calórico total), tienen una incidencia de síntomas y procesos patológicos relacionados con el climaterio, claramente inferior a la que se observa en las mujeres occidentales.

Los fenómenos vasomotores son los más carácterísticos del climaterio, consisten en crisis de sudoración y enrojecimiento que afecta la cara, cuello y parte superior del tórax: "sofocos". Las isoflavonas se han mostrado eficaces en controlar estas crisis vasomotoras.

Estos mismos estudios epidemiológicos también han señalado que las mujeres orientales presentan una incidencia de osteoporosis y de fractura de cadera significativamente menor que la observada en mujeres occidentales.

Los efectos cardioprotectores de los estrógenos pueden manifestarse por: los cambios lipídicos como descensos del colesterol de las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y aumento del colesterol de las HDL; y los efectos vasculares, tanto en el tono vasomotor como en el estado de la pared del vaso. .

Extracto de Salvia:

En la actualidad se sabe que la salvia contiene ciertas sustancias que poseen propiedades estrogénicas, ya que contiene sustancias llamadas fitoesteroles que tienen un efecto estrogénico y refrescante. En las mujeres menopáusicas reduce la sudoración excesiva, por lo que es muy eficaz para reducir los sofocos y sudores noctucnos.

Extracto de Lúpulo:

Se usan las inflorescencias femeninas. En su composición presenta principios estrogénicos, por ello es muy recomendado su uso durante la menopausia.

Aceite de Onagra:

Obtenido por primera presión en frío de las semillas de Onagra, Oenothera biennis, perteneciente a la familia Onagraceas. Este aceite es rico en ácidos grasos esenciales: ácido linolénico, ácido garnmalinolénico, ácido oleico, etc.

El aceite de onagra es recomendable en aquellas mujeres que padecen de síndrome premenstrual ya que favorece el desbloqueo enzimático y la formación de prostaglandina. La prostaglandina El reduce los efectos de la prolactina (honnona que produce los cambios en el carácter y en el metabolismo propios de este síndrome). La prostaglandina El posee también complejas interacciones con los esteroides. El efecto de esto es que la prostaglandina E1 ayuda a suavizar las reacciones de los cambiantes niveles honnonales ocurridos en la segunda mitad del ciclo menstrual. Esta nonnalización ocurre también durante la menopausia, debido a que existe una continua pérdida de estrógenos, lo cual origina cambios en el balance honnonal que con ayuda de las prostaglandinas podremos controlar.

Aceite de Borraja:

Aceite obtenido por primera presión de las semillas de Borago officinalis, perteneciente a la familia Boragináceas. Este aceite es rico en ácidos grasos esenciales y dentro de éstos lleva una proporción muy importante de ácido gamma­linolénico. Este ácido permite la disponibilidad del ácido dihomo-gammalinolénico, que es el precursor de las prostaglandinas de la serie 1 y también de ácido araquidónico que es precursor de las prostaglandinas de la serie 2.

Las prostaglandinas de la serie 1 son en general antiinflamatorias aunque también tengan otros efectos, las prostaglandinas de la serie 2 favorecen la formación de coágulos y trombos, por tanto su síntesis debe ser controlada para que no existan desequilibrios. Las prostaglandinas de la serie 3 conducen a la formación de leucotrienos que son mediadores de inflamación, broncoconstrictores, y de tromboxanos que se forman en las plaquetas y van a inducir la agregación plaquetaria.

Con el aceite de borraja se consigue equilibrar los efectos de las tres series de prostaglandinas en todo el organismo y como consecuencia se obtendrá un equilibrio en el funcionamiento del aparato reproductor femenino, regulando los niveles de las hormonas sexuales (estrógeno s y progestágenos) haciendo al aceite de borraja útil en el tratamiento de síndrome premenstrual y menopáusico.

Calcio Coral:

Una de las consecuencias de la menopausia es la osteoporosis (hueso poroso) es una enfermedad en la que se va perdiendo masa ósea y el hueso se vuelve más poroso, delgado y frágil, resistiendo peor los golpes y rompiéndose con facilidad.

¿Cómo se previene la osteoporosis?

El tratamiento más eficaz de la osteoporosis es la prevención. Los tres pilares básicos en la prevención y tratamiento de la osteoporosis son:

  1. Ejercicio físico
  2. Dieta adecuada con correcto aporte diario de calcio
  3. Estilo de vida

Es precisamente por la importancia del aporte de calcio en la prevención de la osteoporosis por 10 que la fórmula que estamos definiendo tiene calcio, y además en forma de Calcio Coral, ya que:

Tiene origen orgánico, por 10 tanto mayor rapidez en la absorción y fijación en el hueso.

Contiene calcitonina: hormona que aumenta la absorción del calcio permitiendo su rápida presencia en sangre.

Contiene otros nutrientes orgánicos que hace que tenga mayor biodisponibilidad. Además presenta acción antioxidante.

Efecto neutralizante, ya que aumenta el pH.

Lactato de Magnesio:

El magnesio es un mineral. Forma parte del sistema óseo, de la dentadura y de muchas enzimas. El 60% de las necesidades diarias se depositan en los huesos, el 28% en órganos y el 2% restante en los líquidos corporales.

El magnesio ayuda a fijar el calcio y el fósforo en huesos y dientes. Interviene en el equilibrio hormonal.

Bioflavonoides:

Hay distintos tipos de bioflavonoides, y cada uno presenta distintas propiedades. Los flavonoides son importantes para la salud de los vasos sanguíneos. Regulan la permeabilidad capilar, también relajan el músculo liso de las paredes del sistema cardiovascular favoreciendo la nonnalización de la tensión arterial. También posee relevantes acciones protectoras del sistema cardiovascular, ejerce fuerte propiedades antiinflamatorias. Esto es debido a sus efectos antioxidantes y su capacidad para actuar contra las histaminas y otros mediadores de la inflamación como las prostaglandinas y los leucotrienos.
Estas son funciones compartidas entre la mayoría de bioflavonoides, pero algunos otros tienen propiedades específicas, por ejemplo actividad similar a la estrogénica. Esta propiedad la presentan las isoflavonas: Daidzeína y genisteína

Gluconato de Zinc:

El Zinc es un mineral, su presencia se concentra en hueso, testículos, cabello y tejidos pigmentados.
Los síntomas más comunes de la carencia de zinc suelen ser las irregularidades menstruales, el retraso en el crecimiento, problemas de próstata, etc.

Piña:

Su principio activo es la bromelaína, es un enzima proteolítico.
La actividad terapéutica de la bromelaína es que favorece la diuresis y ayuda a liberar más fácilmente los cúmulos de grasas. Se utiliza en el tratamiento de procesos inflamatorios, edemas y como suplemento, en situaciones en que haya una retención de líquidos.

Ácido Fólico:

Acido fólico o vitamina B9. Se ha demostrado que los niveles plasmáticos de homocisteína, tanto basales como posteriores a una sobrecarga de metionina, están disminuidos en las mujeres gestantes y premenopáusicas en comparación con las mujeres postmenopáusicas. En las mujeres premenopáusicas, las altas concentraciones de 17-beta-estradiol pueden contribuir a la disminución de los niveles de homocisteína.

El metabolismo de la homocisteína está unido al metabolismo de algunas vitaminas del grupo B, especialmente el ácido fólico, la vitamina B6 y la vitamina B 12. Cuando hay deficiencia de alguna de estas vitaminas, los niveles de homocisteína en sangre aumentan.

Niveles elevados de homocisteína implica problemas de arteriosclerosis, también afecta a la sangre, haciendo que las plaquetas se vuelvan más adhesivas, y por tanto, favoreciendo la formación de coágulos.

Vitamina B6:

La Piridoxina o vitamina B6 es requerida para la correcta absorción de la vitamina B12 y para la producción de ácido clorhídrico, de ahí que es importante su presencia porque ayudará a absorber la vitamina B12 en el estómago y también a este nivel regula el ácido clorhídrico necesario para una correcta digestión de los alimentos.

Al igual que el resto de vitaminas del grupo B actúa como coenzima en las reacciones que conducen a la ruptura y utilización de los hidratos de carbono, grasas y proteínas. Debe estar presente para la síntesis de anticuerpo s y glóbulos rojos. Facilita la obtención de glucosa a partir del glucógeno almacenado en el hígado y en el músculo, puesto que para que estas reacciones ocurran debe existir la vitamina B6. Es necesaria para la síntesis y la correcta actuación de ADN y ARN.

La vitamina B6 ayuda a mantener el balance sodio y potasio, los cuáles regulan el equilibrio de los distintos fluidos corporales y promueve el normal funcionamiento de nervios y músculos.
La carencia de vitamina B6 se relaciona con la depresión.

Vitamina B12:

La vitamina B12 o Cianocobalamina es una sustancia que contiene cobalto en su molécula y es esencial para nuestro organismo. La vitamina B 12 es necesaria para el normal metabolismo del tejido nervioso y participa en el metabolismo de hidrato s de carbono, grasas y proteínas.. Ayuda a que el hierro funcione mejor en el organismo. Junto con la vitamina B6 colabora en la síntesis del ADN y del ARN. Previene el deterioro mental y mejora la memoria y la habilidad para razonar y concentrarse, además tiene un importante poder energizante.

La vitamina B12 es imprescindible en pacientes con anemia perniciosa, así como en dietas vegetarianas ya que la vitamina B12, .sólo existe en alimentos de origen animal. Interviene en la maduración de los glóbulos rojos y puede proteger el hígado del daño causado por sustancias tóxicas y alérgicas.

Vitamina C:

La primera función de la vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, es el mantenimiento del colágeno, que es una proteína necesaria para la fonnación del tejido conectivo en la piel, ligamentos y huesos. Las necesidades de vitamina C aumentan con la edad debido a la necesidad de regenerar el colágeno.

Durante la menopausia, se produce un deterioro de los órganos por la pérdida de estrógeno s, así podemos decir que se producen arrugas en la piel por pérdida de turgencia, se produce osteoporosis debido a una reducción de la masa ósea, la vitamina C juega un papel importante en la recuperación de los efectos producidos en esta etapa.

La vitamina C tiene propiedades antioxidantes que pueden bloquear la fonnación de sustancias dañinas para nuestro organismo como son los radicales libres.

La vitamina C promueve la formación de los huesos fino y los dientes, mediante la protección de la dentina y la pulpa. Combate la enfermedad de las encías conocida como enfermedad piriodontal, característica del escorbuto, cuando existen deficiencias de vitamina C las defensas se ven debilitadas y la superficie de las encías se hace más permeable a las bacterias y tóxicos.

El hombre depende de fuentes dietéticas de vitamina C ya que es incapaz de sintetizarla. La absorción de esta vitamina es mayor en dosis pequeñas que en dosis grandes, por eso es mejor tomar pequeñas dosis varias veces al día. El exceso de vitamina C es eliminado por la orina.

Vitamina D3:

La carencia de Vitamina D3 produce osteoporosis, de ahí la importancia de aportar Vitamina D3 durante la menopausia.

Vitamina A:

La vitamina A o retinol desempeña funciones tales que hace que sea imprescindible para la salud humana. Interviene en el crecimiento y reparación de los tejidos.

Interviene en la construcción de los huesos y los dientes, así como en la formación de la sangre.
La vitamina A refuerza las paredes de las células de las mucosas que recubren el tracto digestivo, respiratorio, riñones y las hace más resistentes a los agentes infecciosos ya los contaminantes externos. La vitamina A ejerce efectos estimulantes sobre el sistema inmunitario aumentando la actividad de anticuerpo s y la producción de células luchadoras activas contra la enfermedad.
Interviene en la construcción de los huesos y los dientes, así como en la formación de la sangre.

Vitamina E:

Lo que se conoce como vitamina E son un grupo de componentes llamados tocoferoles que tienen un gran valor nutricional biológico.

La vitamina E es un antioxidante natural que protegerá todas las células y sustancias contenidas en nuestro cuerpo de la oxidación causada por los radicales libres, que son moléculas muy dañinas que se forman cuando pierden un electrón. Como el envejecimiento de las células es debido primariamente a la oxidación, la vitamina E es útil para retardar este proceso, además previene la formación de cicatrices en la superficie del cuerpo, esto es en la piel, y también dentro del cuerpo.

La vitamina E es altamente efectiva inhibiendo la coagulación de la sangre, también refuerza las paredes capilares y de esta manera ayuda a que el alimento y el oxígeno lleguen a todas las células del organismo.

Acerca del autor
  • Miriam Reyes

    Miriam Reyes una profesional experta en nutrición y dietética. Tiene más de 12 años de experiencia en  atención a pacientes con sobrepeso y problemas de alimentación. Estudió en la Universidad del Valle de Atemajac  (UNIVA), donde obtuvo la licenciatura en nutrición. Perfil en Linkedin.