Contaminación Corporal

Publicado: 05/05/2007 - Actualizado: 17/07/2016

¿Qué es contaminar?

Contaminar significa alterar nocivamente un organismo. Bajo el orden natural de cualquier organismo, contaminar es deteriorar, desde el aire que respiramos, el agua que bebemos y el suelo, hasta el cuerpo y los pensamientos y las emociones pueden ser causa de la acción de agentes externos que rompan con su armonía y su “limpieza”.

El cuerpo y su deterioro

Pienso que nuestro medio ambiente refleja, en gran parte, la calidad de los organismos que lo habitamos. Ver basura, el aire y el agua en mal estado, etc, es lo mismo que ver en el organismo acumulaciones de comida chatarra, refrescos, comida frita, malos hábitos alimenticios, demasiados azúcares refinados, etc.. La naturaleza se altera con los agentes contaminantes de la misma forma que el cuerpo lo hace, a tal extremo que las reacciones violentas de la naturaleza como incendios, tornados, temblores, plagas, etc, son similares a las reacciones del cuerpo como fiebres, dolores, malestares y demás. El desgaste que sufre cualquier organismo ante los efectos de la contaminación provoca que este se deteriore rápidamente, la contaminación no sólo debilita, sino que además provoca un agotamiento en todo sentido.

Crisis de contaminación

Se dice que la muerte puede ocurrir durante una crisis de enfermedad, pero no en una crisis de curación.

A cada instante el cuerpo está buscando nivelar y equilibrarse para mantener su salud, elimina las sustancias tóxicas ya sea por medio de catarros, fiebres, orina, heces, flemas, sudor, etc. Este es un proceso normal, la forma que tiene el cuerpo de auto regularse. Sin embargo, cuando estas funciones naturales comienzan a ser obstruidas, el cuerpo manda señal de alarma, por medio de la enfermedad avisa que algo está rompiendo severamente con su equilibrio. Si uno se hace sordo ante estas llamadas y continúa los mismos hábitos a pesar de las señales del cuerpo, la enfermedad puede realmente agravarse. Sin embargo, si uno presta atención y toma conciencia de lo que la enfermedad es, uno puede transformar una crisis de enfermedad en una crisis de curación. Ciertamente ambas crisis son procesos de eliminación y restauración, pero su diferencia recae en que la crisis de curación es un proceso consciente, es decir, se apoya a que el cuerpo se componga de acuerdo a hábitos correctos, mientras que en las crisis de enfermedad la misma inconsciencia puede estar inhibiendo o suprimiendo con hábitos equivocados varios procesos de eliminación y restauración, lo que conduce a enfermedades crónicas. Las crisis pueden ser severas o leves y ocurren cuando el organismo recae para realizar un proceso de eliminación, no pueden ser provocadas ni por el médico ni por ningún alimento, ocurren cuando el cuerpo está listo, quizás cuando está lo suficientemente contaminado e intolerante a algo.

¿Cómo se manifiestan las crisis?

Los dolores de cabeza, la diarrea, el salpullido, dolores en las articulaciones, fiebres, agotamiento, nauseas y vómitos son algunas de las formas que el cuerpo avisa que esta en crisis.

Para ayudar al cuerpo a restaurarse

En las crisis de un cuerpo contaminado éste no sólo se limpia, sino que regenera células dañadas o débiles, rejuvenece y se deshace de los tejidos viejos y de los ácidos acumulados. Por lo tanto, es indispensable conocer de qué formas podemos ayudarlo para que realmente se restablezca en todo sentido. No está demás recordar que no hay que esperar a que el cuerpo esté enfermo, la salud es un estado natural del organismo, de hecho no tendríamos que preocuparnos en absoluto de estar sanos si realmente tuviésemos hábitos que hablaran del respeto que se merece el organismo.

  • Aléjese de lo que le “contamina” su cuerpo: lo curioso es que, sabiendo muchas veces los efectos tan nocivos del tabaco, del café y el alcohol, de la famosa “fast-food”, la gente sigue consumiéndolos.  Escucho muy frecuentemente decir por ahí  “de algo he de morirme” Ésta es quizás la frase responsable de que más del 90% de la gente esté enferma o tenga algún tipo de padecimiento. ¿Por qué seguimos con los hábitos que nos deterioran? La respuesta puede andar por muchas ramas, pero yo creo que el tronco común de la respuesta es que realmente no hay un respeto profundo por lo que somos. El respeto, en su sentido más amplio, tiene que ver con que tanto nos gusta estar en la vida y que tanto nos satisface vivirla. Por lógica, cuando nos disgusta o enfada algo, lo tratamos mal.
  • Contaminación de actitudes: estudiar con ánimo la maravilla de la naturaleza es saber que en ella se encuentra toda medicina y alimento necesario. Pero esto puede importar poco cuando, como se ha dicho, hay un disgusto o inconformidad dentro de uno que no ha encontrado solución. El sentirnos atrapados, el sentir que somos poco, que no logramos lo que queremos, que somos mal amados o aceptados y que la vida está fuera de nuestro alcance, provoca una serie de emociones agresivas y deprimentes que influyen contaminando todas nuestras demás actitudes. Observar lo que pensamos cada día, lo que sentimos y de que forma estamos viviendo, tomarnos un tiempo de reflexión profunda para ver como podemos vivir la vida de una forma más satisfactoria, es ayudar mucho a erradicar los hábitos que nos están deteriorando. Por lógica, cuando nos entusiasma algo, lo cuidamos y lo procuramos con lo mejor.
  • El paseo por ti mismo y la culpa: muchas veces nos es difícil encontrar aquellas cosas que nos molestan o nos irritan, y muchas veces tampoco sabemos como solucionarlas aunque las detectemos. Por lo general, la culpa de las cosas que hicimos o que hubiéramos hecho son las que más nos contaminan. Debes tomar en cuenta, cuando notes cualquier culpa dentro de ti,  que uno siempre hace lo mejor en cualquier momento, y que no importa lo que hiciste o dejarte de hacer, sino lo que quieres hacer ahora. Cualquier experiencia lleva a un conocimiento, la culpa no cabe por que has ganado un entendimiento a partir de lo que has vivido y eso es lo valioso que tienes ahora. 
  • Cómo es arriba es abajo: canta un viejo refrán metafísico que “cómo es arriba, es abajo”, es decir, como son tus pensamientos, es tu cuerpo, tu vida, y viceversa.

Así que a continuación te recomendamos algunos alimentos que pueden comenzar a corregir cualquier desequilibrio en tu cuerpo, y, de paso, influirán en tus estados de ánimo y mentales.

Los GERMINADOS: son una fuente excelente de enzimas para restaurar y rejuvenecer el organismo.

Los CEREALES con cáscara contienen todos sus minerales además de que son una excelente fuente de fibra. El pan o las galletas de centeno, avena, trigo, cebada, linaza, sésamo, etc, son ideales para sustituir por las harinas refinadas, las cuales son como una especie de “engrudo”, llenan sin nutrir, inflan sin alimentar, y sólo entorpecen o alteran funciones vitales del cuerpo. Disuelve tres o cuatro cucharadas de CLOROFILA líquida en un litro de agua y bébela durante el día.

Pon todo tu esmero por hacer a un lado los embutidos y productos refritos, en tus venas se va quedando una gran acumulación de estás nocivas grasas que lo único que provocan es obstruir el libre flujo de la sangre, además de que las excesivas sales que estos productos contienen secan la piel, los ojos, las mucosas e irritan el hígado y el estómago.

Hazte dos o tres JUGOS al día en donde mezcles diferentes verduras o frutas frescas (procura no combinar frutas con verduras), y endulza tus bebidas con alguna melaza o miel. Los azúcares refinados además de causar una innumerable lista de padecimientos y desequilibrios, afectan terriblemente el sistema nervioso llenándonos de estrés, depresión y ansiedad, el azúcar blanca pudre los dientes, origina que se caliente la sangre y engendra todo tipo de obstrucciones, además de afectar severamente el sistema endocrino y robarse el calcio del cuerpo.

Evita los productos HIDROGENADOS, que quieren decir, refinados.

Prefiere verduras, frutas y alimentos ORGÁNICOS, es decir, aquellos que no contienen aditivos químicos ni insecticidas, los cuales son terriblemente irritantes para el organismo.

Los productos a base de SOYA pueden sustituir positivamente los productos animales.

La LEVADURA DE CERVEZA es uno de los alimentos más completos que existen, contiene 8 aminoácidos esenciales 19 vitaminas y complejo B. Además, es rica en ácido nucleico, básico para la regeneración de células. Si este no es parte de tu dieta, debería de serlo.

Acerca del autor
  • K. Laura Garcés G

    Escritora, terapeuta y conferenciante. Es una amante de la medicina natural y del poder de la mente y las emociones en el cuerpo y la vida.  Además, ha estudiado nutrición y desarrollado dietas apropiadas para apoyar este proceso de curación.Ha escrito más de 1500 artículos en revistas de España y México, ganadora de dos concursos literarios. Linkedin