Banano ecológico desde Perú
La importancia del cultivo del banano ecológico u orgánico en Perú es indiscutible. Y es que en los últimos 5 años se han multiplicado sus exportaciones, según informa el Ministerio de Agricultura de ese país. Precisamente, según datos de la Dirección de Agronegocios del Minag, en el 2003 el volumen anual de exportación fue de 18 mil toneladas, mientras que en el 2008 se multiplicó por más de cuatro veces, hasta alcanzar las 78 mil toneladas, que equivalen a un valor de 45.5 millones de dólares.
El 2009 augura nuevos aumentos de estos datos. Ya, entre enero y febrero de este año, el valor de las exportaciones de banano orgánico se incrementó en 35% respecto al mismo periodo de 2008.
Así es que el mencionado ministerio prevé para 2009 prevén aumento del 20%, con un volumen de negocio de 55 millones de dólares. La Unión Europea (UE) se ha consolidado como el principal destino de las exportaciones peruanas de banano orgánico con un 60% del total, y seguida de otros mercados como Estados Unidos, con un 31% del total, y Japón, con el 9%.
En lo referente al precio de la versión orgánica de banano peruano, la diferencia es de dos dólares entre la caja de bananos orgánicos (9 dólares) y los convencionales (7 dólares).
El segundo exportador de esta fruta es la República Dominicana, con unas exportaciones por valor de 42’5 millones de dólares.
El cultivo del banano y el enfoque ecológico
No se puede negar que el banano es, hoy en día, una de las frutas más consumidas y cotizadas en el mundo. Y su cultivo presenta un enemigo que interfiere en sudesarrollo natural: su planta padece una enfermedad, la “sigatoka negra”, presente en los principales países productores
El banano se produce en extensos monocultivos, en los que se aplican gigantescas dosis de veneno, de plaguicidas, de fungicidas, y no sólo a raíz de la sigatoka negra, ya que antes padecía otra enfermedad, el llamado Mal de Panamá. El uso intensivo de agrotóxicos generó un gran desequilibrio, a tal extremo que hoy podemos decir que el cultivo del banano es totalmente artificial.
Sin embargo, existen nuevas posibilidades y propuestas para el cultivo del banano, por ejemplo en el marco de un enfoque ecológico. El proceso ecológico del cultivo del banano brinda lo que podemos denominar “autonomía” al agricultor ya que le permite competir con calidad y otorga viabilidad social a un cultivo que está en vías de perder viabilidad económica y biológica.
El ejemplo de Ecuador
Los ecuatorianos, cuando advirtieron la presencia de la sigatoka negra, recurrieron de manera indiscriminada a los fungicidas, a tal punto que algunos productores vieron que ello les iba a consumir toda su ganancia. Es que se ingresa en un circuito por el cual cuantos más fungicidas se emplean, más resistencias genera el hongo de la sigatoka, lo que lleva a tener que aplicar mayores dosis. A partir de allí, hubo productores que comenzaron a ensayar prácticas agroecológicas, en el marco de un proceso que pasa por encontrar el equilibrio del suelo en sus propiedades físicas, biológicas y químicas para fortalecer las plantas. Se sabe que la sigatoka entra en escena cuando hay una sobresaturación de agua en el suelo, que acelera el envejecimiento prematuro de la hoja favoreciendo el desarrollo del hongo. Por ello, un suelo dotado de más materia orgánica es determinante para que las plantas presenten una mayor resistencia al hongo.
La segunda parte consiste en nutrir la planta a través de biofertilizantes. Los biofertilizantes no son nuevos en sí mismos, pero sí constituyen una tecnología nueva en la agricultura moderna. En Ecuador comenzaron a dar un resultado fantástico, al producir plantas sanas y resistentes con un metabolismo equilibrado.
La ventaja es que se está utilizando una tecnología de punta que, a diferencia de los transgénicos, se produce en la misma propiedad del productor, y no hay residuos de plaguicidas, obteniéndose un banano de calidad y más nutritivo. Un banano que tiene entre 28 y 30 por ciento más de vitaminas y minerales, y 30 por ciento más de materia seca, por lo cual se conserva mejor.
Así es que reducir el uso de fungicidas conduce a nuevas opciones agrícolas. Para aquellos que disponen de las condiciones ambientales necesarias para este cultivo (los ecuatorianos, los costarricenses, los colombianos, los filipinos) lo mejor es pasar a una producción ecológicamente equilibrada.
Fuente: Ecoalimenta.com / Secretaría Regional Latinoamericana